miércoles, 23 de marzo de 2011

Hipocresía sexista

Siempre me ha parecido mal que alguien tenga opiniones diferentes para un mismo asunto, en función de si quien lo protagoniza le cae bien o mal. Creo que los principios y los valores son para mantenerlos y defenderlos ante cualquier situación. Lo otro, en mi pueblo, se llama cagada.
Viene esto ante el espectáculo que nos vienen ofreciendo de un tiempo a esta parte determinadas personas que no dudan en utilizar un doble lenguaje a la hora de enfrentarse a algo tan de moda últimamente como la igualdad entre hombres y mujeres. Un principio que algunos defendemos hasta la médula, pero que otros/otras lo ven con diferentes ojos según las circunstancias.
Un ejemplo podría ser las muchas críticas-denuncias que se vienen realizando ante determinadas campañas publicitarias que se consideran manchan la imagen de la mujer al utilizarla como un objeto sexual porque su presencia en este o aquel anuncio no busca más que promocionar un producto al lado de un cuerpo impresionante de mujer. En función de este asunto se han llegado a retirar campañas costosísimas. Incluso se cuestionan los concursos de belleza por primar el físico a lo intelectual.
Yo siempre he dicho que si una mujer (o un hombre) puede ganarse la vida gracias a su físico, ¡olé sus...!. Y no me rasgo las vestiduras ante estas situaciones.
Sin embargo, sí echo de menos a esos/esas que critican lo que antes he dicho cuando en otros ámbitos se hace un uso desmesurado -entiendo que eso dirían- del cuerpo de la mujer. Me estoy refiriendo, por seguir con los ejemplos, a determinados vídeos musicales. Desde que hace un par de años voy al gimnasio, y ponen continuamente un canal de música en la tele todo el rato, me quedo pasmado ante algunos cantantes. ¿De verdad que hace falta eso para convencer al cliente de lo bien que cantas?
Lo dicho, no me suena haber oído gritar a los de antes contra estos.
Pinchando AQUÍ tenéis un ejemplo de lo que digo (Dura unos siete minutos, pero lo bueno empieza sobre el minuto dos). Y no es el único. Es más, los vídeos de este tipo puede que ocupen el 90% de lo que se ofrece hoy día.

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