lunes, 30 de enero de 2012

Objetivo Sevilla (III): jamacuco al canto

Desde que decidí acudir al maratón de Sevilla (próximo 19 de febrero) vengo diciendo que es un atrevimiento. Y lo pienso simplemente porque voy a participar casi sin entrenamiento. La única preparación será lo que me quede de lo mucho que troté para el pasado maratón de Valencia (27 de noviembre de 2011), los buenos jornales de aceituna que he echado estas navidades, y el poco más de un mes en el que voy a hacer lo que pueda para llegar con cierta solvencia.
Pues bien. Para ayer domingo tenía un plan cojonudo. Las mujeres al mercadillo de Toxiria, y mi cuñao el granaíno y yo a recorrar 28 kilómetros por la Vía Verde, dirección Martos.
Era y es la única tirada larga que haré antes del maratón (mi cuñao sí se lo está currando. De hecho, irá en mayo a los 101 kilómetros de Ronda). Por eso era importante tener buenas sensaciones. Pero lo cosechado fue todo lo contrario. La cosa fue bien, muy bien, hasta el kilómetro 24. En dirección Martos -llegamos hasta casi Alcaudete- hicimos ritmos de 4'40'' e incluso menos, y en la vuelta támbién mateníamos el tipo con el objetivo de bajar de 5' el kilómetro en todo el entrenamiento. Y así lo conseguí hasta el kilómetro 24. En ese momento mi cuaño aceleró para acabar a un ritmo más alto, con vistas a la buena marca que él pretende: bajar de las tres horas los 42,195 kilómetros. Yo qudé solo con poco camino por recorrer por delante, y cierto margen para alcanzar lo deseado. Pero no sólo no pude, sino que al final casi la palmo. Acabé con las piernas totalmente agarrotadas, sintiendo una tremenda falta de líquido y alimento, y sin poder reaccionar aunque sabe Dios que lo intenté. Fue, como decimos en mi pueblo, un jamacuco en toda regla.
Cierto que casi los últimos diez kilómetros fueron cuesta arriba; que no bebí más de 0,3 litros de agua de una botellita y un solo gel reponedor; cierto que tuvimos casi todo el tiempo viento en contra que resultaba, además de molesto, jodidísimo.... y seguramente todo eso influyó, pero yo no sólo acabé fatal físicamente sino que con malas sensaciones en el seso.
Al final la marca no fue tan mala: una media de 5'02'' por kilómetros; y ello a pesar de que el kilómetro 28 lo recorrí en casi 7'30''.
Teniendo en cuenta todo esto..... la cosa pinta mal, pero como a lo largo de la Historia, poco o nada se ha escrito bueno de cobardes, esta misma mañana me he comprado unas zapatillas para los rodajes más cortos, he decidido con qué otras correré la prueba, y he retomado mis citas en el gimnasio.
Por mi parte no va a ser. Ya veremos.

viernes, 27 de enero de 2012

¿Hice bien?

Llevo dándole vueltas durante toda la semana a un asunto que no consigo quitarme de la cabeza. Me ocurrió el pasado domingo, día 15 de enero. Estaba preparando el programa de radio de Onda Jaén (Buenos días, Jaén), y contacté con un señor para preguntarle si quería ser el protagonista de nuestra sección diaria La llamada de la tierra. Se trata de que el sector primario tenga presencia, cada día, en el programa a través de textimonios en directo de agricultores, ganaderos, pescadores, estudiosos, organizaciones agrarias,.... que están ya a esa hora en el tajo o a punto de irse.
Pues bien, en esta ocasión habíamos pensado en la posibilidad de entrevistar a una persona que, según me dice alguien que le conoce, aliña muy bien los caracoles. En esta época hay muchos caracoles, y este tipo de cosas siempre queda simpático (ya entrevistamos en su día a un hombre que aliñaba aceitunas, o a una mujer que hacía ese día la matanza).
Pues bien, me pongo en contacto con él vía telefónica, le expongo el asunto, y lo primero que hace es preguntarme que cuánto le voy a pagar. Pensé que era broma y, para seguirle el juego, le dije que era algo más simpático y curioso que otra cosa, como ya hicimos con aceitunas, matanza, etc, etc, etc. Pero no, no iba en broma. Me hablaba totalmente en serio. Era su receta y, si la contaba, quería que le pagasen por ello.
Le dijo que muchas gracias por su atención, y que otra vez sería. ¿Hice bien, o debí haberle ofrecido algo?

domingo, 22 de enero de 2012

Objetivo Sevilla (II): a un mes

Poco menos de un mes falta para mi primer maratón del año. Será en Sevilla el próximo 19 de febrero, festividad de San Agatón.
No sé finalmente qué pasará; ni siquiera si podré acabar la carrera, porque lo que ha empezado como un experimento, va a ser realmente un experimento. Correr un maratón sin apenas entrenar. Y es que si para el maratón de Valencia (27 noviembre 2011) me preparé tanto en calidad como en cantidad (me pateé unos 1.000 kilómetros), para este de Sevilla la cosa va a andar realmente corta. A día de hoy tan sólo he podido correr cinco días, aunque también es cierto que el tute que me he dado en la aceituna..... ¿servirá?. Espero que sí porque de lo contrario, me veo en el coche escoba.
Hoy he rodado 18 kilómetros, y aunque he corrido bien, a día de hoy no sé si seré capaz de recorrer los 42.195 metros. Del tiempo, mejor ni hablar. El próximo domingo haré una tirada más larga (en torno a 30 kilómetros) porque es el único día que tengo para ello; ya empiezo a participar en el Premio Diputación de Granada, y se me acaba el margen para entrenar al margen de la competición.
Fijaos la improvisación, que no tengo ni zapatillas para el maratón.
Pero por todo esto mismamente es un experimento. A ver si la preparación para el anterior maratón dura. Hay quien defiende que sí porque recuerdo que hace unos años, en la salida del maratón de Florencia, conocí a un madrileño que nunca preparaba los maratones, y en ese mes -allá por noviembre- ya había corrido en el año 10 maratones, es decir, uno al mes.
Al menos, ese ejemplo, ánimos me da. Ya veremos si después la esperanza no se torna en tragedia.

miércoles, 18 de enero de 2012

Otro no-cumpleaños

Hoy quiero manifestaros mi sorpresa por algo que ocurrió ayer. O, mejor dicho, por algo que no ocurrió ayer. Y es que el que se nos pase a nosotros un cumpleaños, si se trata de alguien que no sea ni amigo ni familiar, podría tener un pase; pero que se les pase a los padres de la criatura, sí resulta más preocupante. Me explico.
Ayer se cumplió el aniversario de algo. De una cosa importante, muy importante –dijeron en su día-, y que sin embargo ha pasado desapercibida en su sexto aniversario.
Me estoy refiriendo al 17 de enero del año 2006. Ese día nació el Plan Activa Jaén. Y fue el mismísimo presidente del gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, quien lo presentó aquí, en Jaén, en la capital, en la Casería de las Palmeras (para más señas), en lo que fue su primera visita oficial a Jaén.
Se le llamó en aquel momento Plan Jaén Siglo XXI, y fue aprobado por el Consejo de Ministros tres días después, esto es, el 20 de enero de 2006.
¿Es normal que un día como este pase desapercibido?.... ¿Tan desapercibido?
Debo reconocer que mi intención era hablar del cumpleaños ayer mismo, en su día de fiesta. Pero al comprobar que ningún medio de comunicación se había hecho eco de la efeméride, decidí dejar pasar el día para ver si alguien lo recordaba. Pues nada. Ni medios de comunicación, ni responsables públicos y políticos, ni siquiera los mismos padres del homenajeado, esto es, Gobierno central, Junta de Andalucía y Diputación provincial.
Lo más llamativo no es que nadie se acuerde de un plan que anunció -en un primer momento porque luego se incrementó- la nada desdeñable inversión inicial de 1.200 millones de euros para el periodo 2006-2010. Lo más grave es que estamos en 2012, por lo que contamos ya con la perspectiva suficiente como para poder destacar lo bueno que ha sido para la provincia tirando de índices de desarrollo, crecimiento, empleo, etc, etc, etc. Es decir, quien lo parió podía ya..., incluso desde hace algún tiempo, haberse puesto medallas al amparo de los éxitos cosechados. Sin embargo no sólo no ha sido así, sino que nadie reclama ahora la paternidad, ni hace gala de ella.
¿Quizá nadie se ha acordado porque no se trató más que de un fiasco? Un servidor, en su día, defendió la teoría de que era un timo. A día de hoy aún sigo pensándolo. Y cosas como esta, la del olvido, ¿creéis que me dan la razón?

martes, 17 de enero de 2012

Aniversario de un error de bulto

Dice el siempre sabio refranero que “Quien olvida su pasado está condenado a repetirlo”. Se refiere, lógicamente a cosas negativas que hicimos en el pasado, y que no debemos perder de vista para no caer nuevamente en el error. Aunque también sabemos que el hombre es muy dado a ello, “a tropezar dos veces en la misma piedra”... me refiero.
Hoy quisiera hablar de un asunto que ocurrió hace unos años, que ya no me gustó en su momento, y que año tras año lo recuerdo en su aniversario para que no se repita.
Fue hace nueve años. En concreto, el 16 de enero del año 2003. Este que les habla acudía, con un operador de cámara compañero de Onda Jaén, a cubrir una rueda de prensa. Era una comparecencia del candidato del Partido Socialista a la alcaldía de la capital. Estábamos en plena campaña electoral, y Marcos Gutiérrez aspiraba a ser el alcalde. Sin embargo, ese día dio un paso no demasiado positivo. El alcaldable no permitió que el equipo de Onda Jaén se quedara en la sede socialista local para cubrir su rueda de prensa. Se nos echó, amablemente, eso sí, pero se nos echó a través de su responsable de prensa.
Aquel día muy pocos reaccionaron de una manera adecuada a una agresión dictatorial tan brutal contra la libertad de expresión, y contra el derecho a recibir y emitir información. Algunos sí. Y desde aquí, y a pesar de que ha pasado mucho tiempo, una vez más les doy las gracias. Ellos lo saben.
No estuvo fino, ni mucho menos, Marcos Gutiérrez. Seguramente reconoció después su error, y ya con eso podemos darnos todos satisfechos. Ojalá no vuelva a pasar.
Mejor, mucho mejor, para todos.

jueves, 12 de enero de 2012

Objetivo Amsterdam (I): sigue la rebelión

Ya lo hice al principio de año con ese desayuno alpujarreño, y sigo en mis trece.... mientras pueda. Me refiero a mi pelea particular con este jodido 2012, que desde todos los sitios nos lo ponen como el auténtico hombre del saco moderno, y contra el que me estoy rebelando porque no creo que haya que dejarlo todo en manos del destino; nosotros también tenemos algo -mucho- que decir sobre nuestro propio futuro.
Pues bien, he vuelto a hacer una especie de locura. En lugar de correr un maratón por año, en esta ocasión tengo previsto participar en dos. Si ayer os anunciaba mi inscripción en el Maratón de Sevilla que tendrá lugar el próximo 19 de febrero, ayer mismo hacía también firme mi participación en el Maratón de Amsterdam (21 de octubre).
Pero no sólo he pagado los 60 euros del ala que exige la confirmación de la participación, sino que incluso he reservado y pagado el vuelo. En los próximos días confío en hacer lo propio con algún hotel que no salga muy caro.
La carrera, en octubre. Las reservas, en enero. Si eso no es rebelión, con las perspectivas tan negras, o rojas, que se presentan ante nosotros, que venga Dios y lo vea.
En Sevilla iré a probar un maratón sin prácticamente entrenamiento. Amsterdam, sin embargo, será el gran objetivo de la temporada que ya os iré desgranando en próximos catites.
Espero que tanta rebelión no me lleve a donde van a parar la mayor parte de los seguidores de este tipo de movimientos: al cementerio (aunque sea metafóricamente).

miércoles, 11 de enero de 2012

Objetivo Sevilla (I): el experimento

No sé si finalmente me arrepentiré, pero ya le he puesto nombre a lo que será -si no pasa nada- mi sexto maratón. El próximo 19 de febrero participaré en el de Sevilla. Ahí es nada.
Debo reconocer que no lo he pensado en demasía, quizá llevado por la euforia nacida del buen resultado conseguido en Valencia hace un par de meses. Mi objetivo era bajar de tres horas y media, y al final logré parar el crono en 3h 26' 08''. Lo dicho, objetivo conseguido y con solvencia. Por eso, porque ya he logrado lo que quería, ahora voy a hacer una especie de experimento. Correré Sevilla prácticamente sin entrenar porque desde Valencia apenas si he corrido dos o tres días. Aunque, eso sí, en la aceituna me he hartado de ir de un lado a otro.
El experimento realmente no consistirá en eso, porque aunque el entreno es más bien corto, algo entiendo que me quedará de la preparación realizada para Valencia, y como ya he acabado la aceituna, me queda un poquito más de un mes para ponerme a tono.
El segundo punto del experimento es que en Valencia me sentí tan bien, que no sé muy bien qué hubiera pasado si en lugar de ir retenido en la primera media maratón, hubiera ido un poquito más rápido. A lo mejor la marca sería ahora mejor, o quizá me podría haber hundido al final por el exceso de ritmo inicial. Ya digo que no lo sé. Pues eso es precisamente lo que voy a hacer, o voy a intentar hacer: ir un poco más rápido al principio, y a ver a dónde llego.
Si el tiempo es mejor, pues mejor. Y si no consigo llegar, pues no pasa nada; a disfrutar porque el objetivo de la temporada ya está conseguido, y a disfrutar de los kilómetros que queden.
Pues, nada. Nuevo reto, y nueva serie de catites. A ver cómo acabamos.

domingo, 8 de enero de 2012

Diario Jaén, mi empresa

Cuando un medio de comunicación cae, los cimientos mismos de la sociedad en la que vive también tiemblan. Y es que sin la libertad de expresión, sin el derecho a informar y a recibir información, en definitiva, sin el artículo 20 de nuestra Constitución no es posible una sociedad democrática y libre. Por tanto, no es bueno que un medio como Diario Jaén inicie la senda que ha iniciado –despido de cuatro personas, y parece ser que la cosa continuará-. Y esto os lo dice una persona acostumbrada a lidiar, prácticamente desde siempre, con el cuestionamiento continuo de la empresa en la que trabaja: Onda Jaén Radiotelevisión.

Cierto que muchas veces los tiros van dirigidos a los dirigentes.... a otra dimensión. Se trata de una especie de cacería -política en nuestro caso- en la que suelen entrar muchos.... en ocasiones casi todos, diría yo. Lo peor es que se participa en la cacería a saco, apuntando alto y a matar, aunque también sin tener en cuenta que los trabajadores se ven afectados con seguridad; quizá como un daño colateral, pero tocados al fin y al cabo. Por eso mismo, porque en Onda Jaén sabemos, y mucho, de todo esto, no he querido entrar en este asunto con anterioridad a pesar de conocer, y bastante bien, la situación. Por respeto a los trabajadores, que siempre son quienes menos culpa tienen, y sin embargo los que se comen la mayor y peor parte del marrón.

Les doy, por tanto, desde aquí todo mi apoyo a unos trabajadores que, comprometidos con su empresa y con su trabajo, se rebajaron el sueldo un 5% el año pasado, y este año han vuelto a aceptarlo para que la cosa no llegara a los tintes que finalmente ha tocado. Precisamente esto es lo que llama la atención: el que a pesar del esfuerzo de los trabajadores, no sea suficiente.

El otro día algún periodista de Jaén, de otro medio y al hilo de tantos despidos que se producen por todas partes, se preguntaba: ¿y si la culpa no es de los trabajadores y sí de los dirigentes?. Pues imagino que, como en un equipo de fútbol, se echa al entrenador porque es lo más fácil. En el caso de Diario Jaén se podría cuestionar lo acertado, o no, -empresarialmente hablando digo- de que en su día se apostara por despedir -o invitar a que se fueran- a buenísimos periodistas, optando por lo barato, periodistas que hoy formarían una de las mejores redacciones de España. También podría analizarse la práctica supresión de una acojonante red de corresponsales y un modelo de información provincial/local que partió la pana durante muchos años, y que, como digo, se aniquiló al amparo de -otra vez- lo barato. También podría ser cuestión de estudio una alianza estratégico-política que en su día fue muy fructífera económicamente hablando, pero cuyo color ahora está en crisis, muy en crisis, y además con muchas ganas de venganza desde bastantes frentes; quizá la época boyante debería haber servido para almacenar fondos que solventaran el problema en una época que, como la actual, hacen falta, y que sin embargo... ¿no se guardaron?. También se podría tener en cuenta una extrañísima estrategia publicitaria, quizá obligada por la política, que no contribuyó más que a crearse enemigos, y que podría haber pasado factura después.... ahora...

Digo que todo esto podría haber sido analizado, e incluso con mala leche. Pero no lo vamos a hacer porque al final, y como siempre, los verdaderos perjudicados serían los trabajadores. Por eso es mejor no echar la vista atrás, y optar por buscar soluciones a un gravísimo problema para los trabajadores -primero- pero también para el resto de la sociedad.

Diario Jaén fue mi primera empresa. Y por eso, por los muchos y muy buenos años que allí pasé, le tengo una especial sensibilidad. Algo que está por encima de las personas, aunque también irremediablemente unido a algunas de las que fueron, y también a otras que aún hoy son.

Fue mi empresa, lo es ahora, y siempre lo será.

¿Sabéis de qué me acuerdo en momentos como éste?. De Don Esteban. Estoy seguro de que si levantara la cabeza, más de uno se echaba a temblar... y quizá algo más.

martes, 3 de enero de 2012

Afrontando el nuevo año.... ¡¡¡¡con dos huevos!!!!

Ya nos venían diciendo que lo mejor del año 2011 es que iba a ser mejor que el 2012. Y la verdad es que el inicio del nuevo year está siendo tremendamente preocupante por los recortes, subidas, paros, etc, etc, etc.
Pues bien, un grupo de compañeros de trabajo (en concreto, tres. Ni más ni menos. Tres) hemos decidido rebelarnos y plantarle cara al nuevo -y presuntamente- jodido año con... dos huevos y algo más.
Y es que en eso, además de papas a lo pobre, pimientos y un chorizo casero espectacluar, ha consistido el desayuno que nos hemos jincao esta mañana entre pecho y espalda.
Todo ello acompañado de un tercio de fresquita cerveza, para acabar con un reconstituyente cafelito con leche.

Aquí, a la derecha, está la prueba. Antes de dar buena cuenta de ella, claro.
¿Pues sabéis una cosa? Que nos ha gustado tanto, que ya hemos reservado mesa en el restaurante (Picolet Street) para el próximo año, y para degustar lo mismo. Por mucha crisis que haya, y por mucho que pueda crecer. ¡¡¡Con dos huevos!!!... entre otras cosas.

domingo, 1 de enero de 2012

Con buen running

Día 1 del nuevo año. Parecía que no iba a llegar, y ya está aquí. Nueva oportunidad para volver a definir mil y un propósitos que cumplir, y que finalmente se los acabará llevando no se sabe bien quien... igual que el año que acaba, y el anterior, y el otro...
Tengo que reconocer que yo también soy de quienes escriben su lista. Este año lo he vuelto a hacer. Y para intentar cumplir, al menos, en un alto porcentaje, he empezado haciendo ya alguna cosilla. Por ejemplo, correr. Sí, una de mis pasiones. Running. Empiezo el año, por tanto, saliendo un ratito a trotar, y para que me sirva a modo de revulsivo, si el 1 de enero de 2011 corrí 11 kilómetros, hoy he recorrido 12. A ver si significa algo, o al menos yo intento que lo haga.
Este 2011 ha sido bueno, al menos en lo que a mis carreras se refiere. He corrido a lo largo del año más que nunca: 1.785,6 kilómetros. En ello he empleado 130 días, me he cargado tres pares de zapatillas, y he empezado a utilizar dos pares más (las que ahora castigo).
Ha sido un año récord para mí porque he conseguido mi mejor marca de maratón. Fue en Valencia, el pasado 27 de noviembre, y mi tiempo fue de 3 horas 26 minutos y 8 segundos; seis minutos menos que mi mejor marca anterior. Además, a lo largo del año he participado en cinco medias maratones (mejorando también marca personal) y unas cuantas carreras más de menor calibre.
El atletismo es, muchas veces, refugio contra el lado oscuro de la Fuerza, pero sobre todo una forma de entender la vida que, trasladando sus valores a otros ámbitos, se consigue un enriquecimiento importante de la persona.
Ese es uno de mis propósitos para el 2012: seguir corriendo. Y es que resulta tremendamente sacrificado.
Ya lo he hecho en el día 1, y mi intención es intensificar las cifras anteriores. En principio pretendo correr dos maratones, las medias que se tercien, y del resto.... ya veremos.
Aunque para muchos correr es de cobardes, para mí correr es salud y muchas cosas más.... siempre positivas.
Feliz 2012 y que se cumplan vuestros propósitos.... pero, claro, para ello debéis intentarlo.