Tras 18 meses de funcionamiento al relentí, Onda Jaén TELEVISIÓN empieza a carburar para irrumpir con fuerza, de nuevo, en el panorama local. Los máximosresponsables de la empresa aprobaron hace unas semanas la nueva programación, y aunque ni siquiera quienes estamos dentro sabemos con certeza en qué va a consistir en su conjunto, sí nos hacemos una idea por cuanto son muchos los compañeros y compañeras a quienes se les ha encargado la responsabilidad sobre un programa en concreto, y ya han comenzado las grabaciones.
Ahora, como os podéis imaginar, aquello es una auténtica locura porque hay que poner en sincronía el quehacer diario de los informativos con la masiva grabación de programas, y eso teniendo en cuenta no sólo los recursos limitados de una TELEVISIÓN local, sino también las posibilidades de los propios protagonistas de esos programas: los ciudadanos de Jaén.
Ya digo que los nervios están a flor de piel -casi más-, aunque también entiendo que es algo lógico porque se trata de echar a andar una compleja maquinaria que, al final y aunque casi todo sale muy bonito, son muchos los esfuerzos que exige el ofrecer un producto de calidad aceptable.
Tampoco sabemos cuándo comenzarán las emisiones, aunque todo apunta a que sea tras las fiestas navideñas porque, de esta manera, se tendrá un colchón suficiente de programas grabados como para que las emisiones no se interrumpan, una vez comiencen, por imprevistos que puedan surgir.
Estamos, por tanto, ante una ocasión -otra más- de demostrar de lo que es capaz un medio que, por el simple hecho de encontrarse donde se encuentra, ha sido históricamente cuestionado, mientras otros -en su misma situación, o muy parecida- tienen patente de corso para hacer lo mismo, y con toda legitimidad. Ojalá los buenos deseos presentes lleven a Onda Jaén TELEVISIÓN a volver a ser el medio más importante -que ya fue- en su sector.
La lástima es que, una vez más y ya van demasiadas, la RADIO vuelve a ser la gran sacrificada. Aunque el jefe supremo del ente juraba y requetejuraba en una nota de prensa la apuesta firme y decidida por la RADIO y la TELEVISIÓN, finalmente el potaje y todos sus avíos son para el medio estrella: la tele. Aquí tampoco puedo hablar con seguridad absoluta, pero también por lo que parece, ningún nuevo programa se pondrá en marcha a través de las ondas, continuando la raquítica existencia actual más cerca del emitir por cumplir, que del emitir porque creo en tí.
Al final llegamos a la misma conclusión que nos ofrece un sabio proverbio chino: para que haya ricos es imprescindible que también haya pobres. Una pena que la emisora que se escuchaba en la capital casi más que todas las demás juntas siga condenada al ostracismo cual Cenicienta en espera de su hada madrina. Ojalá se cumpla el cuento.
Ahora, como os podéis imaginar, aquello es una auténtica locura porque hay que poner en sincronía el quehacer diario de los informativos con la masiva grabación de programas, y eso teniendo en cuenta no sólo los recursos limitados de una TELEVISIÓN local, sino también las posibilidades de los propios protagonistas de esos programas: los ciudadanos de Jaén.
Ya digo que los nervios están a flor de piel -casi más-, aunque también entiendo que es algo lógico porque se trata de echar a andar una compleja maquinaria que, al final y aunque casi todo sale muy bonito, son muchos los esfuerzos que exige el ofrecer un producto de calidad aceptable.
Tampoco sabemos cuándo comenzarán las emisiones, aunque todo apunta a que sea tras las fiestas navideñas porque, de esta manera, se tendrá un colchón suficiente de programas grabados como para que las emisiones no se interrumpan, una vez comiencen, por imprevistos que puedan surgir.
Estamos, por tanto, ante una ocasión -otra más- de demostrar de lo que es capaz un medio que, por el simple hecho de encontrarse donde se encuentra, ha sido históricamente cuestionado, mientras otros -en su misma situación, o muy parecida- tienen patente de corso para hacer lo mismo, y con toda legitimidad. Ojalá los buenos deseos presentes lleven a Onda Jaén TELEVISIÓN a volver a ser el medio más importante -que ya fue- en su sector.
La lástima es que, una vez más y ya van demasiadas, la RADIO vuelve a ser la gran sacrificada. Aunque el jefe supremo del ente juraba y requetejuraba en una nota de prensa la apuesta firme y decidida por la RADIO y la TELEVISIÓN, finalmente el potaje y todos sus avíos son para el medio estrella: la tele. Aquí tampoco puedo hablar con seguridad absoluta, pero también por lo que parece, ningún nuevo programa se pondrá en marcha a través de las ondas, continuando la raquítica existencia actual más cerca del emitir por cumplir, que del emitir porque creo en tí.
Al final llegamos a la misma conclusión que nos ofrece un sabio proverbio chino: para que haya ricos es imprescindible que también haya pobres. Una pena que la emisora que se escuchaba en la capital casi más que todas las demás juntas siga condenada al ostracismo cual Cenicienta en espera de su hada madrina. Ojalá se cumpla el cuento.
1 comentario :
Primero felicitarlo por su blog.
Quizá el dicho de que nadie es profeta en su tierra, podría aplicarse a Onda jaén.
Constantemente criticada por todo lo que hace, o por lo que debería hacer.
Por ello,quiero romper una lanza a favor de Onda jaén y sus trabajadores, en mi opinión grandes profesionales.
Que trabajan por y para Jaén.
Y que algunos casos es aún más llamativo, siendo periodistas de fuera.
para concluir este comentario, solo felicitaros por la nueva programación y expresaros mi más profunda admiración.
Gracias por su atención.
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