viernes, 31 de diciembre de 2010

Entre "Ir a la escuela" y "Haraquiri político"

Debo reconocer la valentía que ha demostrado la alcaldesa de Jaén con la puesta en marcha del tranvía. No voy a entrar en si hacía falta, o no; en si hay otras cosas más necesarias, o no; en si podría encontrarse alternativas más baratas, o no... Esos serían debates interesantísimos, pero los dejaremos para otros foros y otros momentos.
También hay que echarle... agallas al enésimo cambio que se produce en las direcciones de calles y avenidas con respecto a los vehículos. Creo que son millón y medio en la última década. Los que entraron en vigor el otro día, pueden gustarnos más o menos; ser más acertados unos que otros; verlos unos lógicos y otros no; útiles o inútiles... Pero hay una cuestión que creo cae por su propio peso: es una barbaridad dejar en un solo carril ascendente el Paseo de la Estación, cuando hace dos telediarios eran cuatro carriles. Éste creo que es el auténtico talón de Aquiles de la última reordenación.
Ayer, por ejemplo, a las 19,35 horas recorrí a pie y de manera completa todo el Paseo de la Estación. El atasco -en sentido ascendente- comenzaba en la Plaza de la Constitución y llegaba hasta la rotonda de Renfe, es decir, lo ocupaba todo. Se trata de un auténtico infierno no sólo para quienes circulan por allí, sino también para quienes quieren acceder a él a través de Arquitecto Berges y Ejército Español (estas dos calles están continuamente colapsadas). Y eso que aún está prohibido el giro a la izquierda en la calle Baeza, porque cuando ya se pueda realizar se trata de otra calle que echa más coches a una vía completamente saturada.
Otro dato. En el tramo comprendido entre el antiguo Asuán y la Plaza de las Batallas -entre 200 y 300 metros aproximadamente- conté ocho autobuses urbanos.
Cierto que todavía no funciona el tranvía, y cuando lo haga quitará algunos coches de las calles. Cierto que cuando funcione el tranvía, muchos de los autobuses que ahora circulan por el Paseo de la Estación serán trasladados a la Avenida de Madrid, y eso reducirá el tráfico. Cierto que ahora hay cierta confusión entre los conductores, y eso provoca una circulación más lenta.
Pero no es menos cierto que el tranvía, parece ser, no empezará a funcionar de manera efectiva hasta el mes de abril. Es decir, casi cuatro meses de infierno.
Tampoco es menos cierto que por muchos autobuses que se eliminen, el colapso está garantizado.
Sigue sin ser menos verdad que quien deba utilizar el Paseo de la Estación, no tendrá más remedio que hacerlo, porque no hay alternativas.
Parece ser que, visto lo visto, la única solución para que el tráfico sea fluido está en que todo el mundo deje el coche en la cochera, y utilice el transporte público, o se traslade a pie. Pero para ese viaje no hacían falta las alforjas de los varios miles de millones de pesetas que ha costado el tranvía.
Hace poco decía alguien en alguna tertulia política nacional que el sueldo de nuestros políticos es bajo. Y eso hace que sólo los menos preparados, quienes no pueden buscarse las habichuelas en otro sitio -donde se paga por capacidad y productividad- sean los que ocupan esos puestos públicos. Yo no diría tanto, aunque tampoco descartaría completamente la teoría. La intentaría compartir con ese sabio consejo que Vito Corleone le daba a su hijo Michael cuando éste empezaba a sustituirle como El Padrino: "ten cerca a tus enemigos, pero más cerca todavía a tus amigos". Y es que las puñaladas traperas que más duelen suelen llegarte de quien más cerca tienes, y, por lo inesperadas que resultan, hacen más pupa de lo que sería lógico.
Pues ya tiene nuestra alcaldesa dos elementos entre los que puede reflexionar: mandar a la escuela a alguien, o vigilarse bien la espalda.
A mí, personalmente, esto me suena más a haraquiri político.
En cualquier caso, y como el tiempo es siempre el que da y quita razones, esperaremos una certificación... o no.

lunes, 27 de diciembre de 2010

¡¡Qué frííííííío!!

¡Vaya tela el frío que hace estos días!. Menos mal que la luz sólo va a subir un 10% a partir del 1 de enero, y el gas sólo un 4%, que si no, no se qué íbamos a hacer para calentarnos.
El otro día, y a cuenta de las bajas temperaturas, me pasó una cosa increíble. Fue el día 24 a eso de las siete y media de la mañana. Como he hecho otras muchas veces, y eso que en esta ocasión no era tan temprano como habitualmente, fui a correr un ratito. Lo novedoso es que me fui con un gorro de lana para cubrirme las orejas, pues dos días antes también salí, pero sin gorro, y lo pasé bastante mal; incluso pensé en algún momento que las tenía congeladas y que se me caerían con sólo tocarlas... como en las películas.
Lo cierto que en esta ocasión el gorro cumplió perfectamente con la misión encomendada, y el rodaje salió bastante bien. En cualquier caso, noté que hacía bastante frío porque a pesar de que había corrido 12 kilómetros, y que iba con guantes, gorro, mallas largas, doble camiseta... no tenía ni pizca de calor.
Lo gracioso fue que cuando llegué a mi casa, pasadas las ocho y media de la mañana, un vecino, tras darme los buenos días, llamó la atención sobre algo extraño que tenía en el gorro. Rápidamente me miré en el espejo del ascensor y comprobé que tenía parte del gorro congelado, o mejor dicho, con hielo procedente -imagino- de la escarcha que cae al amanecer en las jornadas de bajas temperaturas.
¡Menos mal que me llevé el gorro, que si no, esta vez sí que me quedo sin orejas, y quizá sin algo más!
Para tener notario de lo ocurrido, aquí os dejo una foto que me hice nada más entrar en casa.
¡Vaya tela el fríííííííííííííííííííío que hace!

jueves, 23 de diciembre de 2010

Vuelta por Navidad

¿Qué ex alto cargo político vuelve a casa por Navidad?. Apostó, y fuerte, pero la jugada no le salio como él había previsto. De hecho, fue guillotinado, y finalmente optó por la retirada a sus cuarteles de invierno. Ahora, cumplidos los plazos legales, pide reincorporarse a su puesto de trabajo.
Visto lo visto, y los milagros propios de la Navidad, a lo mejor hasta lo recuperan como activo político de cara a las próximas elecciones. No lo creo, pero como en esto de la política lo burros vuelan tan alto...

miércoles, 22 de diciembre de 2010

¡¡¡Premio!!!

Al final han tocado 100 euros en el décimo de abajo, el del Real Jaén. No está mal. Podemos pagar pocas deudas, muy pocas... casi ninguna, pero menos da una piedra.
Ya os dije que compraseis uno, bueno pues alguien a quien le di el coñazo, y de qué manera, no me hizo caso y ahora se ha arrepentido.
Bueno, pues ya sé el décimo que compraré para el año que viene. Os lo digo cuando lo tenga.
¡¡HALA JAÉN!!

El Gordo

Atención a este décimo. Hace semanas que recomiendo su compra de cara al sorteo de esta mañana; incluso he llegado a ser pesado con algunos compañeros de trabajo, y sin embargo no han seguido mi consejo.
No es que lo haya soñao una abuela, pero creo que va ser El Gordo de la Lotería de Navidad que se sortea hoy. Dicen que la Suerte suele, cada año por estas fechas, ser solidaria con los más necesitados, y por ello los grandes premios suelen ir a personas representativas de este sentir; protagonistas de historias casi límite que, por ello mismo, se merecen una pizca de felicidad, aunque sea en forma de euros.
Pues bien, este número, el 33203, representa un auténtico drama. Es el número que ha vendido el Real Jaén, una institución que en las últimas semanas se caracteriza por lo esperpéntico, por estar al límite de la desaparición por falta de dinero, por una situación extrema llevada hasta límites surrealistas; incluso en lo referente a la lotería porque se retiraron los décimos de la administración, se vendieron cobrando los dos euros de demasía de rigor en apoyo al club, pero luego se gastaron en pagar otras deudas todo el dinero, el que era para ellos y el que era para la administración. El lotero no ha tenido más remedio que poner una denuncia en el juzgado, y no sé si el asunto está solucionado a día de hoy, en el que sortean premios que pueden llegar a un número ¿robado?.
¿Podemos encontrar situación más pobre? Pues por eso mismo tiene todas las papeletas para ser El Gordo.
Espero que hayan tenido la previsión de dejar algunos décimos para el club, por eso de si toca. O a lo peor no. Sería ya el colmo.

martes, 21 de diciembre de 2010

Tercer aniversario: vendrá más política

Hace unos días se cumplía el tercer aniversario de elcatite.es. Fue el 14 de diciembre del año 2007. Mucho ha llovido desde entonces. Y mucho he escrito desde entonces. Creo que en este tiempo he mantenido aquellos principios que ocuparon mi primera declaración de intenciones. Y eso que hay quien me ha recriminado el que hable tanto de cosas personales y tan poco de política. Cierto que la política mueve mucho, y da mucho que hablar, y ocupa muchos minutos de tertulias, telediarios... pero creo sinceramente que en la mayoría de las ocasiones no estamos más que ante una pérdida de tiempo. Los políticos dirigen nuestros designios, y sin embargo están a años luz del común de los mortales. Así lo indica su gestión, más próxima a mantenerse en el sillón que a procurar el bienestar de sus administrados.
Por todo esto creo sinceramente que hace falta una especie de revolución de la gente de a pie, una rebelión popular frente a los desmanes de esta especie de extraterrestres que se mezclan entre nosotros, o que son simplemente aquello en lo que muchos se/nos convertimos al conseguir un acta de diputado (concejal, senador, etcétera).
En base a este argumento, del que estoy cada vez más convencido, creo que voy a abrir un poco más los tentáculos de elcatite.es a la irrealidad política que tanto nos fastidia.
Así, en este año que ahora comienza seguirá habiendo cosas personales como carreras, críticas de cine y de libros, deportes, teatro, recuerdos del pasado... pero también una pizca de política; de política y también de políticos, tanto de los malos (los más) como de los buenos (los menos). Me da igual el color. Lo importante es que lo hagan bien, o al menos con el objetivo último de hacerlo bien.
Hablamos dentro de un año... si seguís por aquí.

miércoles, 15 de diciembre de 2010

The Oscar goes to... o más bien Jaén NP

¿Qué concejala del ayuntamiento de Jaén, de armas tomar para más señas, ha rechazado un regalo a modo de película que alguien quiso hacerle?. El presente no llegaba como unos Reyes Magos adelantados, sino que fue ofrecido porque es una película rodada íntegramente en Jaén y, además, dirigida por un jienense, en concreto, el más joven de Europa en su género.

sábado, 11 de diciembre de 2010

Objetivo Málaga (y VII): la foto


Con esta me despido de esta serie. Y quiero finalizar con la prueba de que estuve en Málaga, y lo pasé fatal. Aquí veis mi entrada en meta. Completamente desfallecido, tras pasar la alfombra detectora del chip que todos los corredores llevábamos en la zapatilla, no pude más que pararme (llevaba 17 kilómetros arrastrándome), ponerme manos en jarra, y seguir la fila de gente que había delante sin pensar en nada más que en comer algo (mucho) con azúcar y tirarme por el suelo. Es lo que hice después.
Mi tiempo final fue 3h 40 minutos 45 segundos; aunque en el reloj de meta pone menos, imagino que está roto el último dígito, y donde hay un cero debería haber un ocho. Porque esta imagen es de unos segundos después de pasar por la meta.
Jamás olvidaré este maratón porque sufrí de lo lindo. Pero ya se me ha olvidado. Es lo que tiene esto del correr. Probadlo y seguro que os engancha. El próximo 16 de enero, en la San Antón, tenéis una oportunidad de oro.

martes, 7 de diciembre de 2010

Objetivo Málaga (VI): fracaso total

Roto. Decepcionado. Impotente. Muerto. Cabreado. Dolorido. Jamacucado. Estos son algunos de los sentimientos que tenía tras haber cruzado la meta del I Maratón de Málaga en la mañana de ayer. Bueno, tras haber cruzado la meta y algunos kilómetros antes porque desde algo después de pasar por el punto de la media maratón (21,097 kilómetros) ya sabía que no iba a lograr mi meta de realizar los 42,195 kilómetros en menos de 3 horas y 30 minutos. Y así se confirmó al final cuando paré el crono en 3 horas 40 minutos y 45 segundos. ¡¡¡¡Fracaso total!!!
Me he tirado 17 semanas corriendo una barbaridad, habiendo recorrido más de 700 kilómetros, y gastado casi dos pares de zapatillas. He corrido lloviendo, bajo un sol de justicia, a las cinco y media de la madrugada, a las diez de la noche en invierno, me han dado cortes de digestión, me he caído... y todo ello no ha servido para nada.
¿Sabéis lo peor? Que el mal resultado obtenido no ha sido por mi culpa, quiero decir... que yo he hecho todo lo que estaba en mi mano, pero las malísimas condiciones en las que corrimos en Málaga han hecho que no sea yo el único que no consiguiera su objetivo, sino que no conozco a nadie que lo haya logrado. Un dato. El ganador de un maratón emplea habitualmente entre dos horas y cinco minutos, y dos horas y diez minutos. Más o menos. Pues bien, el ganador de esta carrera lo hizo en dos horas y 27 minutos. Pero es que el segundo clasificado hizo dos horas y 34 minutos. ¡¡Ahí es nada!!.
Tengo que reconocer que yo personalmente me encontraba físicamente mejor que en mi último maratón, el de Florencia, en el que tardé 3 horas y 33 minutos. De ahí que esperaba bajar de las 3h 30min en esta ocasión. Y así me lo han ido confirmando los diferentes tests que he realizado. Sin embargo he comprobado más que nunca que un maratón es imprevisible, todo puede ocurrir, y así ha sucedido ahora.
El caso es que la cosa empezó bien, y la organización nos colocó a todos muy bien en la salida, según los tiempos estimados de cada uno. Por ello la salida fue perfecta, a pesar de realizarse desde una pista de atletismo.
Pronto se truncó todo a causa de la lluvia. No calló demasiada, pero lo suficiente para mojarte los pies y afrontar más de 42 kilómetros con los zapatos más pesados de lo normal, y con los dedos sufriendo por los roces.
La media maratón la hice muy bien, por debajo incluso de mis tiempos previstos. Y eso que el cuerpo me pedía ir más rápido, algo que yo frenaba en previsión de que al final pudiera gastarse la gasolina, tal y como ocurrió finalmente.
A partir del kilómetro 22 las piernas empezaron a pesarme, y en el 25 se me bloquearon completamente. Yo intentaba avanzar, pero me resultaba imposible. La máquina no carburaba.
Si a eso le unimos unas avenidas larguísimas que se hacían eternas a través de unos feísimos polígonos industriales y un desangelado paseo marítimo sin prácticamente público alguno animando, que eso ayuda y de qué manera, junto con algunos falsos llanos que jodían de lo lindo, principalmente en la parte final de la carrera, obtenemos una condiciones negativas para el corredor.
También tuvimos una humedad altísima, junto con muchísimo calor, y eso que estamos en diciembre y llovía. Pues a pesar de eso tenía que echarme una botella de agua por la cabeza para refrescarme en cada punto de avituallamiento.
Lo dicho, fracaso total de carrera debido, creo sinceramente, a los condicionantes externos. Creo que nos ha pasado algo parecido a lo de la Armada Invencible.
Al acabar estaba fatal, e incluso llegué a pensar que esto no merecía la pena. Seguramente no lo merezca, pero ya busco otro maratón para desquitarme. No, si ya lo dice aquel viejo proverbio chino: Sarna con gusto no pica.
Ciudad Real (año 2003), San Sebastián (2008), Florencia (2009) y ahora Málaga. ¿Cuál será la siguiente? Creo que no tardaré en decíroslo.
Heartly regards de un corredor decepcionado pero también enrabietado.

domingo, 5 de diciembre de 2010

Objetivo Málaga (V): la suerte está echada

En un par de horas partimos hacia Málaga. Mañana es el gran día. Ya no hay vuelta atrás. La suerte está echada.
¡Cuánto ha llovido desde aquel 9 de agosto de 2010 en el que empecé mi plan de preparación que concluye mañana!. Han sido 17 semanas de tiradas largas (unas más exigentes que otras) y cortas, de rodajes tranquilos, de series a tope, de gimnasio, de fisio... Y ya sólo queda esperar que pasen las horas para afrontar mañana la prueba rey del atletismo.
Han sido 724,3 kilómetros de entrenamientos a lo largo de 52 días distribuidos entre las 17 semanas que os he mencionado anteriormente. Para hacer esto he acabado con las zapatillas que disputé el maratón de Florencia (hace poco más o menos un año) y casi he liquidado otras que me compré para los rodajes menos exigentes. También he probado las que adquirí para disputar mañana el maratón. Las compré el pasado mes de enero -eso es previsión- y en este tiempo sólo les he hecho 189,6 kilómetros.
Ayer me tocaba, según el plan, el último rodaje, y el viernes el último día de gimnasio. Sin embargo, sustituí las dos cosas por.... un día en la aceituna. Para más inri, el primero. ¡Ahí es nada!. Finalmente la cosa no fue tan mal, y sólo tengo algo cansadas muñecas, manos y articulaciones del codo -estuve las seis horas y media con la vara-, pero como con eso no se corre, pues nada. Me he tomado alguna pastilla de eferalgán, y el tío está como nuevo.
Ya queda casi nada para mi cuarta maratón. Os seguiré contando.

martes, 30 de noviembre de 2010

Objetivo Málaga (IV): faltan seis días

Tal día como hoy, pero del año 2008, estaba por tierras vascas (San Sebastián, para más señas) participando en su maratón. Tal día como ayer, pero del año 2009, estaba por tierras italianas (Florencia, para más señas) participando en su maratón. Tal día como el próximo lunes, 6 de diciembre, estaré por tierras andaluzas (Málaga, para más señas) participando en la primera edición de su maratón.
La verdad es que el destino tiene menos glamour, pero no es menos cierto que si nosotros no apoyamos lo nuestro, apañaos vamos.
El trabajo de preparación ya está hecho, y aunque estos días no estoy pudiendo entrenar con normalidad a causa de la lluvia (no para ni p'atrás), lo intento en cuanto encuentro un hueco. Debo reconocer que en ocasiones dudo de poder alcanzar mi objetivo de recorrer los 42 kilómetros y 195 metros en menos de 3 horas y 30 minutos, por estos días que no entreno, pero por otra parte sí confío en conseguirlo porque en los tests que he realizado al respecto no sólo he mejorado, y de largo, los tiempos de mi última maratón (la de Florencia donde empleé 3 horas y 33 minutos) sino que además alcanzo los que me marca el plan diseñado para lograr ese objetivo.
Por tanto, sensaciones contrarias pero también muchas ganas de que llegue el gran día.
Será mi cuarta maratón. Ojalá todo vaya bien porque ya estoy pensando en las siguientes.

sábado, 27 de noviembre de 2010

Eterna y, encima, no acaba

No tiene por qué ser una relación causa-efecto, pero cada vez tiendo más a pensar que las películas, cuanta más gente va a verlas, peores son.
Hoy he estado viendo la séptima (creo) entrega de Harry Potter. Y la sala no sólo estaba a reventar, sino que casi nos hemos quedado sin entrada. Este no ha sido el único elemento extraño en comparación a mis habituales asistencia al cine. También me ha llamado la atención que la película tiene un intermedio. ¡¡Pero como va a tener un intermedio una película que es la primera parte de una segunda parte que vendrá dentro de unos meses, y las dos a su vez son, como digo, la séptima entrega de la saga Harry Potter!! Pues sí, lo tiene.
Creo sinceramente que se ha alargado el metraje sin sentido porque esta primera parte se hace, en muchos momentos, eterna. Incluso chavales que entraban encantados, preguntaban al compañero de butaca que cuánto iba a acabar.
La excesiva duración no es lo único negativo. También se hace difícil la historia en sí, pues te enteras de muchas de las cosas porque las hemos oído antes en cientos y una crítica o en vídeos promocionales, pero durante la película se dan por sabidas, o no se explican bien. ¿Es que hay que leerse antes el libro?. Pues estamos apañaos.
Mucha magia, muchos efectos especiales, Harry Potter sigue con su filosofía de siempre, acompañado de sus dos inseparables amigos, y enfrente tienen a los malos de siempre.
En esta primera parte parece que el asunto se centra en definir las fuerzas de los dos ejércitos que se enfrentarán en el desenlace final en la segunda y última (esperemos) entrega. A priori, Harry va con desventaja, con mucha desventaja, pero veréis como al final gana.
Lo comprobaremos, según me dicen, para junio.

sábado, 20 de noviembre de 2010

Escala de valores

El otro día me llegó un e-mail tremendamente interesante. Al menos así me parece a mí. Aquí os lo dejo. Ojalá os/nos sirva de algo porque, como dice, da la sensación de que nos estamos equivocando en la escala de valores que, por decisión propia, marca nuestra vida:

Un hombre de negocios norteamericano estaba en el embarcadero de un pueblecito costero de México cuando llegó una barca con un solo tripulante y varios ATUNES muy grandes.
El norteamericano felicitó al mexicano por la calidad del pescado y le preguntó cuánto tiempo había tardado en pescarlo.


El mexicano replicó: Oh! Sólo un ratito.


Entonces el norteamericano le preguntó por qué no se había quedado más tiempo para coger más peces.


El mexicano dijo que ya tenía suficiente para las necesidades de su familia.


El norteamericano volvió a preguntar: ¿Y qué hace usted entonces con el resto de su tiempo?


- El mexicano contestó: - Duermo hasta tarde, pesco un poco, juego con mis hijos, duermo la siesta con mi mujer, voy cada tarde al pueblo a tomar unas copas y a tocar la guitarra con los amigos. Tengo una vida plena y ocupada, señor.


- El norteamericano dijo con tono burlón: - Soy un graduado de Harvard y le podría echar una mano. Debería dedicar más tiempo a la pesca y con las ganancias comprarse una barca más grande. Con los beneficios que le reportaría una barca más grande, podría comprar varias barcas. Con el tiempo, podría hacerse con una flotilla de barcas de pesca. En vez de vender su captura a un intermediado, se la podría vender al mayorista; incluso podría llegar a tener su propia fábrica de conservas. Controlaría el producto, el proceso industrial y la comercialización. Tendría que irse de esta aldea y mudarse a Ciudad de México, luego a Los Ángeles y finalmente a Nueva York, donde dirigiría su propia empresa en expansión.


- Pero señor, ¿cuánto tiempo tardaría todo eso?


- De quince a veinte años.


- Y luego ¿qué?


- El norteamericano soltó una carcajada y dijo que eso era la mejor parte:


- Cuando llegue el momento oportuno, puede vender la empresa en bolsa y hacerse muy rico. Ganaría millones.


- ¿Millones, señor? Y luego ¿qué?


- Luego se podría retirar. Irse a un pequeño pueblo costero donde podría dormir hasta tarde, pescar un poco, jugar con sus nietos, hacer la siesta con su mujer e irse de paseo al pueblo por las tardes a tomar unas copas y tocar la guitarra con sus amigos.


- Bueno, pero eso es lo que hago ahora señor ¿Por qué tengo que esperar veinte años?



domingo, 14 de noviembre de 2010

Sólo con el sentimiento no se come

Hoy he confirmado de manera empírica que esto del Real Jaén es un sentimiento.
En los últimos días he seguido muy de cerca el follón extradeportivo que se vive en el club... las penurias económicas de las que se derivan auténticos dramas personales y familiares. Quiero decir con esto que conozco bien lo que ocurre; sin embargo no ha sido hasta hoy, hasta esta mañana, cuando he visto a tíos como carros arrodillarse ante no sé bien quién o qué... digo que no ha sido hasta hoy cuando he sucumbido a la emoción. Y es que estos tíos piden de la manera más humillante que se puede hacer ante mi club... ante mí. Y lo peor es que no piden la luna, sino la nómina que les comprometieron en su día por hacer su trabajo. El trabajo lo hacen, pero el cobrar no.
Por todo esto entiendo perfectamente que se pidan responsabilidades al dueño del club, a Carlos Sánchez. Digo que lo entiendo, pero también creo que hay que tener cierta memoria histórica, y no olvidar de un plumazo que este al que ahora se sataniza fue quien salvó en su día al mismo club del que ahora se le quiere echar dándole una patada en el culete. Y lo peor es que él ha afirmado que no se niega a irse, sino que a pesar de todo el lío que se ha montado todavía no hay nadie que haya puesto una alternativa encima de la mesa; o al menos que conozcamos de manera pormenorizada y con visos de futuro, es decir, poniendo los billetes encima de la mesa.
Porque por mucho sentimiento que tengamos, que nos arranquemos, que usemos para cagarse en los... de alguien... al final, eso hay que tenerlo claro, con el sentimiento no se come. Lo que hace falta son euros, los mismos que todavía no han aparecido por ningún sitio.

jueves, 11 de noviembre de 2010

domingo, 7 de noviembre de 2010

Vergüenza y bochorno

La plantilla y el cuerpo técnico del Real Jaén parece que finalmente se han desplazado en taxi hasta Écija para jugar el partido de hoy. Y no lo ha hecho porque sobre el dinero, sino porque como no hay y no se pueden pagar los poco más de 400 euros que costaría el autobús, el club ha tenido que aceptar el ofrecimiento de la gremial del taxi de trasladarles de manera gratuita.
Una cuestión que no sólo da mala imagen, sino que ésta se empeora cuando nos enteramos de que la expedición ha salido de Jaén sobre la una y media de la tarde para que así los jugadores puedan comer en sus casas, y el club se ahorra pagarles la comida.
Con historias como estas, la situación del Real Jaén empieza a ser bochornosa. Pero si les unimos que el utillero ha reconocido en la prensa que, ante la falta del pago de la nómina, se alimenta pidiendo en los supermercados la comida que van a tirar, y que el banco amenaza con echarle del su piso; que algunos futbolistas empiezan a pensar en compartir piso; que un jugador ha tenido que pagarse de su propio bolsillo una operación de pubalgia porque el club no puede pagar seguros privados, y la mutua no hace más que eternizar los procesos; que el campo tiene cortada la luz por falta de pago, y todo funciona tan sólo un par de horas, por la mañana, que es lo que dan de sí los 20 euros de gasóil que se gasta el club al día; que las taquillas están embargadas para poder pagar a algún proveedor; que el servicio de autobuses también está suspendido porque tras numerosas facturas sin pagar, el propietario pide ya el dinero por adelantado -los padres de algún equipo de categorías inferiores han tenido que echar un porreteo para pagar algún desplazamiento; que al preparador físico de las temporadas pasadas se le adeudan varias decenas de miles de euros;... incluso alguien me ha dicho -no se si porque es verdad, o porque esta situación propicia la existencia de bulos que, ante la situación de precariedad, adquieren cierta veracidad- que la semana pasada los jugadores del San Roque se ducharon con agua fría, e incluso tuvieron que encender una especie de fogata en el vestuario para calentarse...
Todo esto, y algunas cosas más, hacen que el bochorno inicial se convierta en vergüenza. Si la semana pasada manifestaba aquí mi orgullo de ser jienense por lo bien que había salido la media maratón Paco Manzaneda, hoy no tengo más remedio que reconocer que me da vergüenza que el Real Jaén, que este Real Jaén, sea mi equipo.

jueves, 4 de noviembre de 2010

Las pequeñas pero importantes cosas

Cierto que si hoy día valoramos las cosas por su precio, es mucho más importante algo que cuesta mil pesetas que aquello otro cuyo valor es un duro. Sin embargo, la utilidad de las cosas modifica sustancialmente esa escala de valores porque por muchos millones que nos puedan pedir por la mejor vivienda de España, su confort se pone seriamente en duda si, por ejemplo, se nos estropea en pleno invierto la caldera de agua caliente, y nadie viene a arreglarla, por poco que pueda costar su reparación. Una simple caldera se convierte en toda una joya, mientras que la joya que es nuestra casa se convierte más en una cueva inhabitable que en el palacio de nuestros sueños. Estamos ante el valor de las cosas, que es muy diferente al precio de las cosas.
Viene todo esto a que no entiendo muy bien que se hayan gastado una millonada en las obras del tranvía, y ahora, cuando el proyecto tiende a ver la luz, los ciudadanos empezamos a sufrir problemas ridículos pero muy importantes porque alguien no ha reparado en arreglar la caldera. Me refiero a los semáforos instalados en el tramo de la carretera de Madrid. Han instalado muchos, quizá más de los que sean necesarios, pero al margen de ese debate en el que no quiero entrar en este momento, sí es necesario puntualizar que un paso de peatones -cada semáforo lleva uno- es para que pasen los peatones. Por eso, si no hay peatones, no tiene sentido el paso.
En los pocos días que llevan funcionando estos nuevos semáforos, he pasado por allí un millón y medio de veces, sufriendo continuamente atascos provocados por semáforos en rojo para los coches y en verde para los peatones, pero que sólo en una ocasión he visto a alguna persona utilizándolos.
El problema radica en que los semáforos dan prioridad a peatones o vehículos de manera mecánica, cuando lo lógico en estos lugares donde el tránsito de personas es muy dispar sería el colocar en cada semáforo un botoncito para que el peatón que quiere cruzar la calle lo pulse, y entonces, sólo entonces, prioriza su paso al de las máquinas.
Un simple botoncito, o varios, está a día de hoy haciendo tambalearse el que la gente se plantee, otra vez, lo acertado de construir un tranvía. ¿Que no se lo creen? En ocasiones las colas llegan desde la rotonda de la Bariloche hasta el monumento de los Donantes de Sangre... e incluso más allá. Y es sólo un ejemplo. ¿Siguen pensando lo mismo?
Es, en definitiva, el valor de las pequeñas pero importantes, muy importantes, cosas.

domingo, 31 de octubre de 2010

Enhorabuena, concejala

Hoy he participado en la Media Maratón Paco Manzaneda, y el primer pensamiento/sentimiento aparecido es que me he sentido orgulloso de ser de Jaén. Orgulloso porque he participado en un peazo de carrera en mi propia ciudad, espléndidamente organizada, con un cuidado exquisito al corredor, con una bolsa de regalos que -creo- se trata de la mejor que se da en España... y con un bocata de chorizo, acompañado de su correspondiente cerveza, que te da la vida.
Lógicamente hay cosas que mejorar o reconducir para que la prueba siga creciendo en todos los sentidos, pero lo que ha demostrado hoy el Patronato de Deportes, y demás entidades colaboradoras, es que en Jaén sabemos no sólo estar a la altura de las circunstancias, sino además ser los mejores a la hora de hacer algo como esto.
Orgulloso no sólo porque yo, como corredor, me he sentido espléndidamente atendido, sino porque todo con el que he hablado, provenientes de un sin fin de lugares, no hacían más que piropear la carrera y los organizadores... y como consecuencia... la ciudad de Jaén.
Creo sinceramente que con este tipo de cosas es como podemos pasar de ser un pueblo grande a una ciudad plena. Enhorabuena a quien está haciendo posible esto, y especialmente a la concejal de Deportes. Tendrá sus cosas malas o no demasiado buenas, que las tiene, pero también es justo reconocerle al César lo que es del César... de ahí que debamos felicitar a Ascensión Beltrán como la principal culpable del resurgimiento de la Media Maratón. El que venga tiene ya marcada la altura del listón. Lo único que le pido es que no lo baje.

lunes, 25 de octubre de 2010

La Historia vista desde un lado

Dicen que lo importante de un libro es tanto lo que dice como quién lo dice, y especialmente en los libros de Historia, como es el caso.
Viene todo esto al hilo del autor de La Guerra que ganó Franco (I) (Planeta DeAgostini. Barcelona. 2007. 276 páginas): César Vidal. Se trata de una persona muy vinculada a una ideología de derechas, de ahí que el simple hecho de iniciar la lectura de este ejemplar ya casi exige que levantes la guardia. Y lo cierto es que cuenta las cosas de una manera imparcial, aunque hay momentos en los que no puede evitar el posicionarse muy claramente. El punto más evidente lo encontramos casi al final del libro cuando, a pesar de que desde un principio acota su desarrollo al análisis de la Guerra Civil española desde un punto de vista militar, invierte muchas páginas en describir de manera pormenorizada las denominas checas que, durante el acoso Nacional a Madrid y con un gobierno del Frente Popular en la capital, hicieron auténticas barbaridades entre la población. Da la sensación que Vidal profundiza tanto en este aspecto con el único objetivo de demostrar que la Izquierda también lo hizo mal, muy mal durante la Guerra Civil, tanto o más que lo que se dice históricamente de la Derecha. Lo que pasa es que el autor sólo describe los desmanes de los rojos pero nada dice de los nacionales... Y algo harían, digo yo.
Al margen de este matiz referente al contenido del libro, sí quisiera destacar varios aspectos con respecto a la forma: hay una auténtica avalancha de lugares, ciudades, pedazos de tierra, batallas, ofensivas, contraofensivas, resistencia... Desconcierto que podría paliarse mediante la inclusión de algún mapa ilustrativo.
Señalar también que no entiendo el por qué algunos autores, como es el caso, van realizando a lo largo de toda la narración continuas notas a pie de página que en lugar de situarse en la misma página en la que aparecen se llevan al final del libro, dificultando tanto su seguimiento que yo siempre me decanto por pasar de ellas.
En definitiva, interesante visión de la Guerra Civil española que resulta claramente formativa, aunque habría que comparar con un autor del otro lado; y así, con lo que dice uno y otro, sacar nuestras propias conclusiones.
P.D.: Ahora inicio una novela, y a su término regresaré a la segunda parte de la obra de Vidal.

martes, 19 de octubre de 2010

Manual para saber de la crisis

Dicen que se trata de la mejor secuela (segunda parte) de la Historia. Yo no he visto la primera parte, y por eso no puedo opinar en este sentido, aunque sí creo que en Wall Street, el dinero nunca duerme estamos ante una película que hay que ver porque, al margen de buenas o malas interpretaciones, de que el guión, la fotografía, la música... puedan ser mejores o peores, la historia resulta de lo más atractivo por cuanto nos retrata/explica el por qué de la crisis económica en la que nos encontramos. Por eso, aunque sólo sea por eso, por saber quién o qué nos ha llevado a esta situación, resulta lo suficientemente interesante como para acudir al cine.
Reconozco que hay momentos en los que me pierdo o, al menos, no consigo mantener el ritmo de la narración porque mi idea de las finanzas y del mundo de la bolsa es muy próximo a cero, pero la cosa se describe de una manera tan lineal y ejemplificadora, que parece más bien que estemos en una clase del colegio.
A mí me resulta difícil de creer que este mundo de las grandes esferas financieras exista, y no sólo es coetáneo nuestro sino que es quien marca el ritmo de la música que bailamos.
No todo en las dos horas y media de metraje se reduce a números, compras y ventas... también hay espacio para el amor, la familia, la lealtad, la traición, el desamor, la desfamilia, y sobre todo para los principios y valores por los que nos movemos; principios y valores que no siempre situamos en el lugar correcto de la pirámide de las prioridades.
Me ha gustado por su vertiende formativa, y por ello busco ya la primera parte.

sábado, 16 de octubre de 2010

Periodismo de raza

Para que luego digan que en Jaén no hay periodistas de raza. No hace falta ir a una guerra para demostrar la valentía y profesionalidad a la hora de desarrollar el trabajo de informador. Aquí, en Jaén, encontramos casos de Nobel porque hasta en el lugar y momento más insospechados el profesional de la información se juega la vida con el único objetivo de que los ciudadanos están plenamente informados.
Para muestra, un botón. Os dejo un vídeo de un equipo de Onda Jaén (Dani reportero y Cristóbal camarógrafo) en plena acción.


miércoles, 13 de octubre de 2010

La vida: seriedad, humor... y vitalidad

Casi por casualidad me veo en el interior de un teatro a la espera de que comience la representación de 100 m2. Se trata de una obra escrita y dirigida por Juan Carlos Rubio, y con sólo tres actores: Jorge Roelas, María Luisa Merlo y Miriam Díaz-Aroca.
El primero es para mi casi un desconocido, aunque recuerdo haberlo visto alguna vez en la tele. Y es que me perdí el que, me dicen, fue uno de sus trabajos de mayor repercusión popular: Médico de familia (no vi ni un solo capítulo). Esta vez no tiene un trabajo excesivamente largo, pero cumple a la perfección el asumir el papel de tipo cómico en una obra muy seria.
María Luisa Merlo no acabo de identificarla con actuaciones anteriores. Su nombre, de tanto sonarme, es casi de la familia, pero la cara me es totalmente desconocida.
Miriam Díaz-Aroca siempre la he encasillado en los papeles graciosos, de risa, exuberantes de chiquillería..., aunque no sé si aquí es lo mismo porque, por lo menos en el folleto de mano, está muy seria.
Finalmente me doy de bruces con una obra sobre la vida misma, sobre la importancia real y relativa de las cosas, donde en demasiadas ocasiones equivocamos el lugar de la escala donde colocamos nuestros valores. La excusa del argumento es la compra de un piso, pero el trasfondo real nos habla de amistad, interés, amor, peleas, desamor, soledad... y, lo principal, de una vida, la nuestra, donde casi siempre nada es lo que parece.
Pensando en que me iba a encontrar una obra cómica -nunca me han gustado, y eso que es lo que más he visto porque lo clásico se representa poco- me encuentro con una historia original marcada por el realismo, esto es, cosas serias con su puntito de humor, pero consiguiendo finalmente hacernos pensar, y mucho.
Por cierto, las dos actrices son todo un descubrimiento.

viernes, 1 de octubre de 2010

Las mujeres al poder

Dice mi cuñao el granaíno -creo que ya os lo he comentado en alguna ocasión- que si de él dependiera, todos los países del mundo estarían gobernados por mujeres. Seguro que nos iría mejor, asegura con total convicción. La verdad es que razón no le falta si echamos un vistazo y comprobamos que en un mundo gobernado por hombres las cosas no han ido demasiado bien.
No sé si en caso de darse esa situación, la deseada por mi cuñado, viviríamos en el paraíso, o no; pero lo cierto es que me surgen ciertos matices a dicha aseveración.
Supongo que si el mundo estuviera gobernado por mujeres, unas cosas irían bien, y otras no tanto. Y no digo esto porque entienda yo que las mujeres estén peor preparadas para afrontar determinados asuntos, sino porque en su gobierno habría luces y sombras, como en los gobiernos de los hombres. Y eso se debe, simplemente, a que no en todos los casos gobernarían las más preparadas, igual que ocurre, ha ocurrido y seguirá ocurriendo con los hombres.
El mejor ejemplo de esto que digo lo encontramos en lo que sucede en estos tiempos. De unos años a esta parte tiende a imponerse la promoción de la mujer para que acceda a todos aquellos ámbitos en los que históricamente ha estado vetada y marginada. Es algo con lo que me declarado completamente a favor, pero lo que no entiendo es que en determinados casos se opte por esta o aquella mujer, no porque esté más capacitada que un hombre, sino por el simple hecho de cubrir una cuota políticamente correcta pero racionalmente reprochable.
Esto está provocando que mujeres claramente incapaces ocupen cargos en los que no sólo lo hacen mal, sino que además son un mal ejemplo para que otras puedan llegar lejos porque así debería ser dada su alta preparación.
En este asunto creo que es el propio sexo femenino el que debería estar especialmente vigilante porque lo que está haciendo es tirarse piedras sobre su propio tejado.
Por eso mi filosofía es: Las mujeres al poder, pero sólo las capacitadas. Igual que debe ser con los hombres.

martes, 28 de septiembre de 2010

Lectura obligada poco gratificante

Seguramente no os supondrá extrañeza alguna esa historia en la que un grupo de piratas no duda en dejar el barco aparcado junto a la costa africana para penetrar a pie en el continente hasta rescatar a la amada del capitán, que fue secuestrada hace tiempo, y de la que ahora han conocido su paradero.
La cosa se vuelve un poco particular cuando añadimos que los piratas deciden llevarse en su misión de rescate todos los enseres del barco, desde los cañones hasta el menaje de la cocina; todo es colocado sobre una enorme ballena que tenían en la nave, y de la que no quieren desprenderse. Así, todos a una, el equipaje sobre la ballena, y la ballena sobre los hombros de todos.
Esta historia más loca que cuerda es la que nos cuenta Juan Muñoz Martín en El pirata Garrapata en África (Ediciones SM. El Barco de Vapor. Madrid. 2001. 137 páginas). Es la tercera aventura de este pirata tan especial, cuyos increíbles viajes no acaban aquí sino que continúan a lo largo de varios libros.
Ya digo que se trata de una historia insólita con tribus africanas que le cortan el pelo a sus víctimas con maquinillas eléctricas; de orangutanes no sólo parlanchines sino impecablemente vestidos con traje y chaleco; y un sin fin de situaciones insólitas dirigidas a niños a partir de nueve años. Al final, final feliz, aunque no del todo. Por cierto, de lo mejor, la tribu de los malos, de los secuestradores, llamada los Tragaldaba, caníbales cuya ciudad es
...grande y hermosa. Grandes casas de barro, árboles, plazas y el gran palacio del rey Mendrugo en el centro. ¡¡¡Toma ya!!!
Abordo esta lectura porque es la primera que le han ordenado a mi hijo Guillermo, de nueve años, en el cole. Yo, como ya sabéis, leo a la par que él, y de esta manera no sólo lo controlo sino que me adentro en mundos en los que no penetraría de no ser por esta cuestión. Espero que la lectura me sirva, al menos, para aprender de un tipo de obras muy particulares que quizá aborde cuando inicie (si alguna vez lo hago) mi etapa de escritor. En esta ocasión estoy un poco desconcertado porque el libro no me ha resultado atractivo; una historia extremadamente simple aliñada con un sin fin de minihistorias esperpénticas que no ayudan más que para despistarte. Yo me pierdo muchas veces... ¿Y un niño de nueve años?.
Le he preguntado a Guillermo y dice que lo único lioso ha sido los muchos nombres de los muchos personajes. (¡!) Lo dicho, a seguir aprendiendo... y quizá a sufrir porque el pasado curso escolar el niño se leyó 36 libros.

domingo, 26 de septiembre de 2010

No merece la pena

Ya vi Avatar la primera vez que se pudo disfrutar de ella en los cines, pero me quedó la cosilla de verla en 3D. Por aquel entonces no había salas de este tipo en Jaén capital, y tras salir de la sesión normal pensé que ésta era una de esas cintas que sí justifican la existencia de las tres dimensiones. Por eso, y porque aquella primera vez entré en la sala con la película empezada y me perdí un poquito del principio -no os podéis imaginar la rabia que me da que me pase eso-, he decidido verla de nuevo.
Lo he hecho este fin de semana, no sólo atraído por esas cosas que os indico, sino también porque anuncian en la promo la existencia de imágenes inéditas. Y he ido a pesar del robo que entiendo que es pagar 8,4 euros por una entrada.
Fui ayer sábado totalmente predispuesto a salir encantado, y sin embargo salí decepcionado. La película volvió a gustarme, como la primera vez, pero no le he sacado al 3D el valor añadido que se le presupone. En numerosísimas ocasiones me levantaba las gafas, y podías ver perfectamente, por lo que me da la impresión de que esta segunda entrega ha sido una especie de timo para hacer más caja aún, y eso que ya hicieron mucha en su día, siendo la más taquillera de la Historia tras Titánic. Además, las gafas resultan incomodísimas, y molestan en exceso tras la media hora aproximadamente de proyección.
Creo sinceramente que no merece la pena. Sin embargo, la sala estaba casi llena.

sábado, 11 de septiembre de 2010

Así fueron las cosas, y así se confirma ahora

Hubo una época en la que en Onda Jaén RTV se apostaba por la televisión y por la radio. Ello significaba, entre otras cosas, que en determinadas ruedas de prensa o comparecencias públicas acudía un redactor para la televisión, y otro para la radio. Por aquella forma de actuar hubo quien fue criticado hasta la saciedad: que si era un despilfarro de dinero público, que si se estaba haciendo un mal uso de trabajadores municipales, que si no se sabía organizar el trabajo... Le dijeron de todo menos bonico.
Estos días he comprobado cómo la radio y la televisión pública regional (Canal Sur) no sólo envía de manera puntual a un redactor para la televisión y otro para la radio, sino que tras departir brevemente sobre el asunto con los compañeros, son ellos mismos quienes me confirman que es la forma de actuar SIEMPRE a la hora de abordar ahora el trabajo diario. Y nadie dice nada. Y me parece bien que nadie berree porque no sólo no hay que rechazar sino alabar y potenciar este tipo de formas de trabajar.
Con este tipo de cosas queda más que confirmado que las durísimas críticas
que se vertieron contra Onda Jaén no fueron laborales/económicas/organizativas... (como se decía) sino políticas. Politiquísimas diría yo.
Enhorabuena para Canal Sur.

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Más bueno que malo

Ayla vive en El Valle de los Caballos (Jean M. Auel. Círculo de Lectores. Barcelona. 2002) su particular aventura personal. Se trata del segundo de los cinco libros que conforman la saga Los Hijos de la Tierra. En el primer libro (El Clan del Oso Cavernario) nos cuentan cómo Ayla es recogida por la tribu del Clan del Oso Cavernario una vez que queda huérfana y completamente sola tras morir toda su familia, toda su caverna (el Clan de los Otros), a causa de un terremoto. Allí vive durante años hasta que su natural rebeldía hace que la convivencia sea imposible; por ello, es castigada a marcharse y no volver, como si estuviera muerta, dejando atrás incluso a su hijo de pocos años de edad.
Ayla inicia en este segundo libro la búsqueda de su gente, Los Otros. Llega a un gran valle que toma como residencia provisional para pasar el invierno y continuar su viaje en la próxima estación. Pero allí se queda más de lo previsto gracias a una magnífica relación con la naturaleza y con los animales de la zona.
Su vida cambia drásticamente cuando tiene su primer contacto con personas: los hermanos Jondolar y Thonolan, de la tribu de los Zelandonii. La autora vuelve a deleitarnos con una magnífica descripción de las relaciones entre representantes de culturas diferentes, a lo que se suma el siempre atractivo
componente derivado de las conexiones/desconexiones hombre/mujer.
Jean Marie Auel es una auténtica experta en la época prehistórica, y así lo demuestra con interminables y aburridas descripciones de cómo aquellas civilizaciones construían barcos o herramientas, cómo eran sus cacerías o bodas, a la vez que realiza soporíferas descripciones de paisajes, plantas, comidas, animales... Es el componente divulgativo del que abusa en el primer libro, y que mantiene en este segundo; por ello, algo que podría quedar en unas 200 páginas sobrepasa las 600.
Frente a este elemento negativo, también encontramos uno positivo. Me refiero a la descripción que realiza de las relaciones entre las personas: sus principios y valores, sus miedos, sus costumbres, las diferentes actitudes que tienes clanes distintos frente a una misma situación (homosexualidad, papel de la mujer/hombre, religión, ciencia, relaciones sexuales...). Es lo que más me gusta, la historia en sí del libro que la autora relega a un segundo -y a veces tercer- plano en favor de demostrar su dominio de aquella época.
Entiendo que Jean Marie ha adquirido sus amplísimos conocimientos sobre la naturaleza, animales, costumbres... a partir de los yacimientos existentes por todo el mundo, y que ella ha estudiado minuciosamente. ¿También es posible eso con las relaciones humanas? Yo quiero creer que sí, sobre todo porque se nos presentan unas civilizaciones de hace miles de años con casi los mismos problemas que caracterizan a las sociedades del siglo XXI.
A pesar de los contras, me quedo con los pros. Ya me he hecho con la tercera parte.

lunes, 6 de septiembre de 2010

Otra decepción

No es nada novedoso en el cine una historia en la que un antiguo sabio, héroe, dios... transmite su sabiduría, poder, espíritu... de generación en generación a alguien que nace cientos/miles de años después. No sólo no es nuevo ese argumento sino que la historia del cine está llena de ejemplos.
Se trata de algo recurrente pero no por ello negativo, sino que puede resultar todo lo contrario. Otra cosa es la gestión que posteriormente se haga de esa historia en la película.
Airbender se enmarca en este contexto, y no me gustó. El aprendiz de brujo también, y tampoco me ha gustado. Y eso que he ido al cine con gran predisposición positiva, pese a que mi hijo (de 9 años) me decía insistentemente que nos estábamos equivocando. Finalmente no he tenido más remedio que darle la razón. A priori, en la balanza positiva situé el que era una historia con origen en la Edad Media, con repercusión en la actualidad; también que el maestro del aprendiz es Nicolas Cage, que me gusta mucho; igualmente me atraía el que la figura del malo la representara el cardenal malo de El Código Da Vinci, otro tipo que también me agrada.
Como digo, y pese a esas cosas positivas que veía antes de entrar en la sala, fracaso total. Y creo que todo se debe a la figura del héroe principal, del aprendiz de brujo. Creo sinceramente que no se puede diseñar para héroe la figura de un tontorrón que es así de principio a fin. Al final pasa lo que tiene que pasar, pero no resulta atractivo, sino todo lo contrario, el que el tipo idiota no sólo se lleve el éxito sino también a la chica.
Otra película más apropiada para el DVD -si acaso- que para el cine.

sábado, 4 de septiembre de 2010

Radicalismos artificiales

Los movimientos de grandes nombres de periodistas/presentadores de los medios de comunicación en nuestro país han existido siempre, aunque en los últimos tiempos están siendo más llamativos porque resultan más habituales y, sobre todo, por la auténtica conmoción que ha supuesto el que Paco González y Pepe Domingo Castaño (y todo su equipo, y alguno más que era de otro) dejen la Cadena Ser y se marchen a la Cadena Cope.
Hace algunas semanas ya me refería a este asunto, y ahora quiero volver a él una vez que han debutado en su nueva casa. Aquí os dejo el vídeo de lo que yo entiendo es un momento histórico. Dura unos quince minutos, y aunque ya digo que es un documento para la historia porque a quienes nos gusta esto del periodismo nos pone los pelos de punta, el texto que lee Pepe Domingo al inicio del programa es para enmarcarlo.
Aunque os pueda parecer, a priori, un poco largo y, por lo tanto, apático para ver, os lo recomiendo encarecidamente. Intentad encontrar el tiempo necesario para disfrutarlo.
Creo que en esto de los medios de comunicación deben desaparecer los radicalismos que no hacen más que dividir en partes muy enfrentadas a la gente. Y la verdad es que no creo que la realidad sea tan así. En los medios hay espacio para el posicionamiento político, pero eso no quiere decir que todo sea así. Hay gente que se limita a hacer su trabajo de la manera más honesta posible, y punto. No hay nada más allá de eso.
¿Os imaginabais hace unos años a González, Castaño (y próximamente Lama) en la Cope? Pues ahí están. ¿Y ha pasado algo? Sólo que los de la Ser se tiran de los pelos por el malísimo negocio que han hecho. Algo que les tirará a la cara el próximo Estudio General de Medios. Remarco, mal negocio, porque van a perder dinero por un tubo. Al final todo se reduce a eso, y punto. Bueno, aquí ha habido algo más, pero eso sólo ellos lo saben; nosotros no podemos más que imaginárnoslo.
Ya lo dice aquel viejo proverbio chino, Si no cuidas de tus clientes (y empleados), alguien lo hará por ti.
Aquí tenéis el vídeo:

martes, 31 de agosto de 2010

Karate Kid. El plagio

No tenía mala pinta The Karate Kid, con Jaden Smith (el hijo de Will) y Jackie Chan. Me intrigaba qué giros le iban a dar a la película original para hacerla atractiva. Finalmente, y una vez que la he visto, he quedado completamente decepcionado porque no se trata de un remake, de una nueva versión de la historia original, sino de un plagio en toda regla. Todo es prácticamente idéntico, salvo algún puntillo gracioso y poco más -los personajes, lógicamente-, al mítico dar cera, pulir cera.
Por tanto, quien haya visto la primera, no hace falta dar cancha a esta copia. Yo he quedado tan disgustado que he pedido al bueno de Rafa Rus -me la ha facilitado en un tris, y eso que no la tenía- la original para que puedan disfrutar de ella mis hijos y mis sobrinos, que ayer sí que se divirtieron porque no han visto la primera, claro. Debo sacarlos de su error.
Solamente una referencia final. Al intento de Jackie Chan de ser el humilde y sabio profesor de Kung-Fu que representó en su día el señor Miyagi. Lo intenta, se aproxima, pero creo que finalmente no lo consigue porque el entorno no le acompaña. Ojalá tenga suerte en próximas aventuras.

domingo, 29 de agosto de 2010

Buenos mimbres en una derrota anecdótica

Hay un dicho en el mundo del fútbol que asegura que si un equipo afronta un partido buscando el empate, finalmente acaba perdiendo. Eso es lo que le ha ocurrido esta tarde al Real Jaén. Cierto que el Cádiz se adelantó en el marcador de manera injusta porque los jienenses jugaban mejor o, cuanto menos, igual. Cierto que el de Zarandona fue un golazo. Cierto que duele muchísimo que te marquen un gol en el minuto 92. Y cierto que el rival que había enfrente era uno de los gallitos del grupo, de los que están llamados al ascenso porque está recién descendido de Segunda A... pero es que cuando el Real Jaén consiguió el empate, en lugar de tirar para adelante e intentar aprovechar el arreón final para buscar la victoria, el entrenador optó por quitar el único delantero, y meter a un centrocampista (Fabios) con más pinta de tercer central que otra cosa.
Quizá lo positivo sea que esto servirá para partidos venideros.
En cualquier caso, bien por el Real Jaén porque se ha hecho un partido muy serio frente al Cádiz, y jugando como visitante. Y eso que durante todo el encuentro los blancos jugaron con 8 ó 9 futbolistas en lugar de los 11 que vestían la camiseta. Creo sinceramente que cuando esta plantilla haga un poquito de rodaje, y despierten quienes intentan jugar durmiendo, aquí hay calidad para intentar el ascenso. Es más, creo incluso que esta plantilla es mejor que la del año pasado.
Una enhorabuena para un jugador: Iván. Y también para el entrenador: por ponerlo.
Por cierto, enhorabuena también para Onda Jaén RTV que nos ha vuelto a acercar a nuestro equipo cuando juega fuera de casa. ¡¡¡BIEN!!!

miércoles, 25 de agosto de 2010

Más sombras que luces

No me convence demasiado lo del cine en 3D, sobre todo desde que hace unas semanas leí en la prensa la entrevista a un director de cine que se decantaba por la desaparición de este sistema. Yo entiendo que hay películas que sí pueden ser interesantes verlas así, pero de ahí a que todo sea ya en 3D creo que es situarse en dos extremos opuestos.
En este contexto decido ver Airbender. El último guerrero en el sistema 3D pues su temática me hace pensar que sí le sacará partido. Sin embargo, no sólo creo que se trata de una película no apta para 3D sino que ni siquiera habría que ir a verla al cine; bastaría con esperar su distribución en DVD para verla en casa. De paso te ahorras la clavada de 8,4 euros que cuesta la entrada.
Cierto que el derroche de medios resulta llamativo, con escenarios impresionantes, luchas masivas, efectos especiales... pero la película falla en casi todo lo demás.
La cosa es que parte de un argumento original: la tierra está dividida en cuatro naciones (Fuego, Aire, Tierra y Agua) que durante siglos han vivido en paz gracias a la existencia de alguien que mantiene el equilibrio, el llamado Avatar. Sin embargo, desde su desaparición -nadie sabe el por qué ni dónde se encuentra- hace un siglo, la Nación del Fuego ha iniciado la conquista del mundo. Digo que aunque no es excesivamente novedoso, sí estamos ante un principio cuanto menos llamativo; máxime cuando le añadimos el componente que supone Aang. Es un niño que parece ser el Avatar, y por tanto tiene la obligación de frenar a los invasores y volver a conseguir el equilibrio.
Pero aunque estos cimientos podrían ser una base sólida para conseguir el éxito, finalmente el desarrollo de la película resulta casi de chiste, totalmente previsible, muy típica y tópica en la resolución de determinados elementos... y el colmo lo encontramos al final, cuando acaba sin acabar pero pasando lo que tiene que pasar.
En definitiva, una decepción.


domingo, 22 de agosto de 2010

Objetivo Málaga (III): ¿alguien quiere un autógrafo?

En estas primeras semanas de preparación para Málaga 2010 me lo estoy tomando bastante en serio, y eso que el tiempo no acompaña: mucho calor, horas extremas para poder entrenar, muchas tentaciones (cerveza, roscas, tapas, helados...) a las que cuesta trabajo resistirse... y sin embargo voy cumpliendo con un alto porcentaje de entrenos realizados; vamos, prácticamente el 100%.
Es cierto que estoy muy motivado, y ayer recibí un fuerte espaldarazo para seguir así. He conseguido ganar el primer trofeo de mi historia atlética. Me refiero, claro está, a esos que se dan a los primeros clasificados, y no a los recuerdos que en algunas carreras se entregan a todos los que consiguen acabar la prueba.
Porcuna celebró en la tarde noche del sábado el primer Ekiden que se organiza en la ciudad, es decir, una carrera por relevos. 26 kilómetros en total a recorrer entre los cuatro miembros de cada equipo (6,5 kilómetros cada uno). Yo competí con otros tres miembros de mi club, el Maratón Jaén, en la categoría de equipos mixtos, esto es, dos hombres y dos mujeres. En total había cinco equipos en la categoría, y conseguimos la medalla de bronce; la plata quedó a tan sólo un minuto, pero para mí es igual porque, como digo, es el primero y, probablemente, último trofeo que consiga en mi vida. Algo, por tanto, muy especial.
Manoli fue el primer relevo, yo el segundo, me siguió Fara, y concluyó Felipe. Quiero darle las gracias a los tres porque la prueba era durísima, con cuestas casi imposibles de superar, y sin embargo no se reservaron nada. De ahí que consiguiéramos ser terceros.
Como digo, estoy contentísimo, casi como si hubiera ganado las olimpiadas, o un mundial, la Copa de Europa, o el Trofeo del Olivo. Además, mis compañeros de equipo tuvieron el detalle de dejarme la copa para que la guarde como recuerdo. No sé si lo saben, pero conservo hasta el sobre en el que nos entregaron los 20 euros (para todos, es decir, 5 euros para cada uno) correspondientes también al tercer puesto.
Me siento como una estrella. Incluso estoy pensando en hablar con El Corte Inglés para firmar autógrafos, y eso, en la sección de Deportes. Si alguien quiere, se lo puedo enviar vía e-mail.
Lo dicho, la cosa va bien. Ya veremos cómo acaba.

martes, 17 de agosto de 2010

De vacaciones (V): se acabó lo que se daba

Parecía que no iba a llegar nunca, pero aquí está el final de las vacaciones. Han sido dos periodos de quince días que se acaban hoy mismo con la incorporación al currelo, que diría Ramoncín. Una vez más me ha gustado esto de partir el mes vacacional por excelencia, y creo que seguiré haciéndolo, si puedo, en años venideros.
Si al principio fue playa y piscina, en este segundo periodo he alternado la playa (que surgió de manera imprevista) con un clásico: la feria de mi pueblo. Entre medias ha habido días intensos de arreglo de trastero, pero poco más. Tantas y tantas cosas como había organizado, finalmente se han quedado en casi nada. No tendré más remedio que afrontarlas ahora, antes de que la frenética actividad del día a día de toda la familia nos vuelva a atrapar de manera irremediable durante los siguientes nueve meses.
De todas formas, el contacto con la realidad laboral no es demasiado brusco porque son todavía muchos los que se encuentran de vacaciones, y la actividad periodística es mínima. Por eso, tenemos una especie de periodo de aclimatación que viene bastante bien.
En todas estas jornadas de asueto han ocurrido muchas cosas. Yo os voy a destacar sólo una: la gamba que hicimos en uno de los momentos de la Feria de Día del pueblo. Quedó espectacular, y espero poder mostrarla cuando se la enviemos a Flo.
Ya sólo quedan once meses para las próximas vacaciones. ¡Qué poco!

jueves, 12 de agosto de 2010

Presión social

Ocurrió hace año y medio aproximadamente. Una compañera de trabajo me manifestaba el fastidio que le suponía el tener que depilarse. Era su respuesta a la queja que yo le había hecho unos segundos antes sobre el coñazo que para mí es afeitarse todos los días. Con su apreciación vino a decirme algo así como no te quejes tanto porque lo mío es mucho peor.
Llegados a ese punto, yo le repliqué que las dos situaciones no permiten comparación alguna porque lo mío (el afeitarse) es obligación, y lo suyo (el depilarse) es voluntario (porque tú quieres, por estética, por estar guapa, para partir la pana...). Y cuando ya pensaba yo que había ganado el debate, ella me dio una respuesta que no esperaba: (era algo así como...): Y una leche porque yo quiera o porque me guste. Me depilo porque me obliga a ello el entorno, la sociedad en la que vivimos. Ya me lo dirás cuando la presión social te obligue también a ti también. La cosa se acabó ahí, con su comentario (muy en serio) y con una sonrisa mía.
Pues estas semanas me estoy acordando, y mucho, de aquello porque empiezo a sentir ya esa presión social ante algo que me parecía imposible hace apenas 18 meses. Digo que es en estas fechas cuando me salta ese recuerdo a primer plano de mi mente porque nos encontramos en vacaciones, vemos muchos hombres y mujeres en las playas y en casi todos sitios ligeritos, muy ligeritos de ropa, y ahí empezamos a apreciar determinados comportamientos. Me refiero al cada vez mayor número de hombres depilados, tanto las piernas como el tren superior. Eso hace que algunos hombres de mi círculo más o menos próximo hayan hecho ya algún pinito en este sentido; otros lo van a hacer de manera inmediata porque se lleva; hay quien se ha comprado una maquinita en el Lidl para, no depilarse, pero sí ir recortándose los pelillos del pecho y de las axilas... Las mujeres empiezan a demandárselo a sus parejas, y también a quienes no lo hacemos porque estamos muy feos.
Ya digo que esto sucede en un plano doméstico, pero la presión social también me llega en otros ámbitos. Por ejemplo, y según me dice mi fisio, mi querida Pilar, soy el único hombre que voy a recibir los masajes sin depilar. Ella me insta a ello, aunque por pura cuestión práctica, esto es, porque los pelos dificultan su trabajo: el masaje.
Yo, como firme defensor de aquello de El hombre, cuanto más feo más hermoso, sigo apostando por la pelambre, por el pelo en pecho, por la tradición, por el macho ibérico de toda la vida. Ya veremos lo que duro.
¡Joder con la presión social!

lunes, 9 de agosto de 2010

Objetivo Málaga (II): empezamos

Hoy comienza la aventura. Por delante hay 17 semanas para acabar participando con solvencia (y el objetivo de bajar las 3 horas y 30 minutos) en el Maratón de Málaga, fechado para el 6 de diciembre. A lo largo de este tiempo recorreré algo más de 800 kilómetros a modo de entrenamiento; unos son más exigentes que otros, aunque lo normal son dos días de rodaje (a un ritmo lento y sólo unos 12 kilómetros cada día), otro día de series (que son más duras a medida que avanzan las semanas) y una tirada larga que en algunos momentos llega a los 26 kilómetros.
Lo dicho, cuatro días de correr, a los que debo unir dos más para ir al gimnasio. Y todo ello complementado con el trabajo, los estudios, y... lo que es más importante, la familia, donde destacan las obligaciones de los niños: fútbol, atletismo, conservatorio, baile, catequesis...
El hecho de correr Málaga hace que se pierda un poco la emoción de un destino con más glamour, pero también resulta algo emocionante participar en la primera edición de un maratón que se pone en marcha; y además tan cerquita.
He de decir que a priori no tengo muy buenas sensaciones porque el día de la carrera estaremos en plena campaña de recogida de la aceituna, es más, seguramente habremos empezado ya, y eso puede ser contraproducente para el entrenamiento. Además, me han hablado muy mal de la organización de la media maratón de Málaga de este año; sería un putada que después de tanta dedicación, unos inútiles te chafen la carrera del año. Pero confío en que finalmente todo salga bien, muy bien, porque siempre que he afrontado algo con cierto temor, al final sale de escándalo. Ojalá sea así.
Hoy empieza para mí el maratón de Málaga 2010.

domingo, 8 de agosto de 2010

Interesante y original

Gerónimo Stilton es uno de los fenómenos más importantes de los últimos años en lo que a literatura infantil se refiere. La cosa comenzó como un personaje más, el propio Gerónimo que es el director-editor de El Eco del Roedor (el diario más famoso de la Isla de los Ratones), viviendo todo tipo de aventuras. Pero tuvo tanto éxito, que las publicaciones sobrepasaron los libritos iniciales (hay casi un centenar) para compartir protagonismo con otros libros de mayor dimensión (tanto en gordura como en calidad de edición). En este Cuarto Viaje al Reino de la Fantasía (Círculo de Lectores. 2009) el autor (que es el mismo Gerónimo) nos cuenta, como os habréis imaginado, la cuarta ocasión en la que viaja al Reino de la Fantasía, un lugar fantástico donde debe descubrir quien ha robado el último huevo de dragón, el que da continuidad a la especie; y es que los dragones son los principales habitantes de este lugar.
Gerónimo, que allí asume el papel de salvador en la figura del Duodécimo Caballero, acaba resolviendo el enigma.
Es la primera vez que leo algo de Gerónimo, y la verdad es que me parece interesante. Interesante lógicamente para los niños pues no sólo los atrapa rápidamente en una aventura alucinante, sino que lo hace jugando con el propio libro, es decir, ofreciendo olores en algunas de las páginas; utilizando un sin fin de tipos de letras que se adaptan a lo que significa cada palabra, algo con lo que el niño va cogiendo soltura lectora a pesar del cambio de tipología; de vez en cuando ofrece recuadritos explicando qué es la envidia, la amistad, o el secreto para vencer el miedo; y, sobre todo, mucho color y mucha ilustración. Todo ello da gran originalidad al libro.
Quien quiera iniciarse en estos libros le aconsejo comenzar por el principio, y realizar de manera ordenada y cronológica los viajes al Reino de la Fantasía, porque las referencias al pasado -tanto de situaciones como de personajes- son habituales.
P.D.: Abordo la lectura de este libro a causa de mi hijo Guillermo, de 9 años. He empezado a leer a la par que él los libros con los que decide disfrutar; y lo hago para que después me cuente lo que pasa, y comprobar realmente que lee. Inicio así un camino casi desconocido, pero que reconozco no me es desagradable pues la literatura infantil -como creador- es algo a lo que me gustaría hincarle el diente. Ya veremos a qué destinos me lleva este novedoso sendero.

jueves, 5 de agosto de 2010

Documento histórico

En más de una ocasión he manifestado mi falta de pasión al -a mi entender- excesivo culto que se brinda en nuestro país a la imaginería religiosa; y no me estoy refiriendo únicamente a la Semana Santa, sino también a romerías, festividades de Gloria, etcétera. Como digo, no me gusta nada, pero como soy un tipo que cree en el talante, lo respeto. Y ese valor del respeto es el que emana principalmente Del Jaén perdido (Francisco Jiménez Delgado. Ediciones Blanca. 2007). Obra de mi amigo y, en ocasiones, compañero de fatigas periodísticas, Paco Jiménez, se trata de un magnífico documento histórico en el que se recogen las muchas muestras de devoción religiosa popular que, por diferentes motivos, desaparecieron en la provincia de Jaén. Unas veces la destrucción de imágenes, templos completos, retablos, etcétera se debió a los radicalismos de las guerras; otras, al simple paso del tiempo; aunque también los accidentes fueron causantes de auténticas desgracias culturales.
Enmarco este libro en el catálogo de los documentos históricos porque entiendo que es eso precisamente, una recopilación de la historia de la provincia de Jaén, con un marcadísimo carácter religioso, pero también sin olvidar el elemento artístico-cultural que representan estas manifestaciones de fe.
Nada más iniciada la lectura del libro se detecta la importante labor investigadora que ha debido realizar el autor para confeccionar la obra, y ahí radica gran parte de su éxito. Cuando las cosas se hacen con ganas y creyendo en ellas, dejando en un muy segundo plano la rentabilidad económica, los resultados obtenidos son infinitamente mejores. He aquí un ejemplo.
Quisiera hacer especial mención al enriquecimiento que se realiza de los datos históricos aportados mediante la inclusión de fotografías de las imágenes, templos o monumentos desaparecidos. Me parece increíble no ya que se hayan podido recopilar esas fotografías, sino su existencia misma.
Hay un viejo proverbio chino que indica que Quien olvida su pasado está condenado a repetirlo. Aquí tenemos el granito de arena que aporta Paco Jiménez para que parte de las barbaries que ha cometido esta terrible Humanidad no se reproduzcan.
Por cierto, creo que ya se ha publicado la segunda parte de este libro. Pronto os hablaré de ella.

miércoles, 4 de agosto de 2010

De vacaciones (IV): continuamos

No está nada mal eso de tener las vacaciones en dos partes. Tras un primer periodo de descanso, vuelves al trabajo con ganas porque sabes que, a la vuelta de la esquina, quedan otros quince días. Pues aquí estamos. Esta vez por tierras amarillas. La verdad es que resulta espectacular un apartamento en primera línea de la playa de La Victoria. ¡¡Espectacular!!.
Pues bien, hoy, para rizar un poco el rizo, hemos ido a lo que dicen que es la mejor playa de Europa. Yo no las he visto todas, pero ninguna como esta. Me recordaba a mi viaje de novios, cuando visité el Caribe. Parece mentira que algo así esté en España, tan cerquita de Jaén.
Lo malo ha sido que hacía un poco de Levante, y no me he dado cuenta de que me estaba quemando. Lo he descubierto al regresar, en la ducha, cuando al ponerme delante del espejo parecía la bandera de España, aunque sustituyendo el amarillo por blanco; es decir, rojo, blanco (con un puntito negro) y rojo otra vez. Mi hijo dice que así no me hará falta ponerme la camiseta de España cuando gane otra vez el Mundial. Bueno, no hay mal que por bien no venga. La cosa ha empezado a escocer un poquito, pero confío en que no vaya a más.
Aprovechando que estábamos cerca de tierras africanas, nos hemos acercado un poquito más, y he visto, por primera vez en mi vida, el continente negro, desde lejos, pero visto queda.
Seguimos disfrutando de vacaciones. Esperemos que no sean las últimas.

domingo, 1 de agosto de 2010

Un gran remedio para un gran mal

Todos tenemos experiencias personales en las que, ante una situación difícil de superar, hemos intentado paliarla con pequeños parches que prácticamente nunca dan resultado. Siempre resulta más interesante y productivo detenerse por un momento, ver la situación con cierta perspectiva, desde un punto de vista objetivo, intentando desprendernos de elementos subjetivos y personales que no hacen más que condicionarnos negativamente a la hora de actuar, y a partir de todos estos elementos tomar una decisión contundente, concisa, definitiva que solventa nuestro problema.
Pues todo esto creo que es lo que hay que aplicar en el Real Jaén. Ya fue un parche su conversión en sociedad anónima deportiva: tan sólo una argucia legal permitió que el club no desapareciera en aquel momento. En estos años se debería haber encontrado una solución, una fórmula, para que la entidad funcionara con solvencia e independencia. No sólo no se ha encontrado sino que han sido tiempos de supervivencia en la miseria, a trompicones, con más voluntad que otra cosa, tirando de esfuerzos personales e individuales, anteponiendo el corazón a la razón. Ello ha motivado que el precipicio volviera a estar estos días a nuestros pies.
Finalmente la situación se ha solventado por el esfuerzo personal de una persona: Carlos Sánchez. Un tipo al que habría que hacerle el mayor monumento que la humanidad haya conocido a lo largo de su historia. Un tipo que no sólo se ha dejado su patrimonio en el Real Jaén, sino que -y eso es aún peor- se ha dejado su salud. Gracias a él, y a algunos otros en años anteriores, el club ha ido tirando para adelante, arrastrándose, pero avanzando al fin y al cabo.
Pero lo que ha vuelto a ocurrir ahora debe hacernos reflexionar a todos. Resulta necesario, imprescindible, obligado... afrontar la situación de manera contundente; encontrar un gran remedio al gran mal que afecta al Real Jaén desde hace años. Más vale una vez colorado que ciento morado porque de no actuar con valentía, el precipicio volverá a estar ahí, y quizá entonces no podamos salvarlo.
No sé bien qué se podrá hacer, pero seguro que por ahí hay gente preparada que encuentra soluciones.
Me duele decir esto porque soy un gran forofo del equipo, pero entiendo que es justo reconocer que al fútbol asisten cada domingo 2.000 personas. Eso no es, ni de lejos, una ciudad; ni siquiera un barrio. Es casi, casi un grupo de amiguetes. Igual nuestras reflexiones de futuro deberían empezar por ahí.

miércoles, 28 de julio de 2010

Imaginación y amistad

Viendo Toy Story 3 he pasado uno de los mejores ratos que recuerdo, en lo que a films infantiles se refiere. Me he reído, divertido, emocionado, intrigado...
En esta tercera parte de la saga, los juguetes vuelven a reivindicarse, su utilidad como magníficos compañeros de juegos, no ante la competencia que pudieran hacerle maquinitas modernas, sino ante otros juguetes de su mismo estilo pero que en esta ocasión asumen el papel de malo de la película.
Woody, Buzz y los demás miembros de esta peculiar familia se ven envueltos en una trepidante aventura que, siguiendo las pautas de las dos entregas anteriores, les lleva a tener como objetivo el regreso a casa, una vez que la abandonaron accidentalmente.

A lo largo de este grandísimo rato de casi dos horas de duración, los juguetes, o mejor, la película apuesta por recuperar la imaginación, por que los niños desarrollen su imaginación utilizando sus viejos juguetes, o modernos, pero aquellos que representan los juguetes de toda la vida. Pero no sólo eso, sino que también encontramos una apuesta clara por el trabajo en equipo, por mantenerse unidos hasta en aquellos momentos en los que parece que todo se acaba, y que llega el final.
Estamos ante una de las películas infantiles más recomendables de los últimos años.

Por cierto, yo he huido del 3D. La he visto con el formato de toda la vida, y ha sido genial. Y es que el 3D, aunque muy de moda últimamente, no siempre resulta útil. Su excesivo uso viene motivado por la mayor rentabilidad que supone para la industria cinematográfica, de ahí que aconseje elegir bien qué películas vemos en 3D.

Un último consejo. En este
Toy Story 3, que no sea acabar la película y abandonar la sala rápidamente. Aconsejable quedarse un ratito viendo, junto a los créditos, las escenas finales.